El Ayuntamiento de Mislata, que preside el socialista Carlos Fernández Bielsa, anunció ayer su intención de "estudiar" la propuesta hecha por la Coordinadora de Asociaciones Vecinales de cobrarle un canon al Ayuntamiento de Valencia por el paso de varias tuberías que abastecen de agua a una cuarta parte de la población del "cap i casal".
Los vecinos sugieren que con el dinero que abonaría la capital por el uso del subsuelo de Mislata, este municipio podría pagar el coste de un vehículo colectivo que sustituya las líneas de autobús cuyo paso por la localidad ha eliminado la Empresa Municipal de Transporte (EMT).
Y es que la iniciativa vecinal no es otra cosa que una respuesta a la decisión del Ayuntamiento de Valencia de que a partir del próximo 5 de noviembre la línea 7 deje de dar servicio en el término mislatero, después de haber eliminado la línea 29 a principios de septiembre. Y es algo que, pese a que el ejecutivo socialista anuncia ahora que "estudiará", ya fue apuntado hace varios meses por el propio alcalde Bielsa cuando el entonces presidente de la EMT Alfonso Novo reclamó una mayor aportación económica de Mislata para que los autobuses continuasen circulando por este municipio.
Según explicó ayer el presidente de la Coordinadora de Asociaciones Vecinales de Mislata, Julián Martínez, bajo la avenida Gregorio Gea "discurren varias tuberías de alta presión que" desde la potabilizadora de la presa de Manises "suministran agua potable a una cuarta parte de la población de Valencia, pero no a los vecinos de Mislata". "Lo que hoy (por ayer) le proponemos al alcalde es que grave con un canon municipal la ocupación de un terreno propiedad de Mislata y eso permitirá obtener dinero para pagar un autobús que sustituya los que la EMT nos ha quitado".
El dirigente vecinal señala que ahora deberán ser los técnicos municipales quienes estudien cómo se puede aplicar este canon, así como el importe del mismo. Según Martínez, pese a que las tuberías pertenecen a la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (Emshi), "el suelo por donde discurren es de Mislata y los expertos que hemos consultados nos aseguran que el ayuntamiento puede cobrar por ello".
Además de esta propuesta, la coordinadora vecinal ha anunciado que prepara para las próximas semanas varias "medidas de presión" ante el anuncio de eliminación de la línea 7 de la EMT. Martínez aseguró que en los estatutos de la empresa municipal se establece la "obligación de dar servicio a Mislata, y esos estatutos no se han cambiado". Además, criticó la propuesta lanzada por la Agencia Valenciana de la Movilidad de unir el vehículo de "metrobús" con los de la EMT en la ciudad a través de un billete único ya que, afirma Martínez, el coste para los usuarios de Mislata aumentará entre un 20 y un 30 %.
