Foro de Municipalismo

Costa defiende el papel de À Punt como «altavoz de los pueblos valencianos»

El director general, Alfred Costa, explicó el papel del ente en la vertebración económica y social de la C. Valenciana mediante una información «de calidad, plural, veraz y de proximidad»

Alfred Costa durante su intervención en el foro de municipalismo.

Alfred Costa durante su intervención en el foro de municipalismo. / Fernando Bustamante

Lluís Pérez

Lluís Pérez

«Somos una plataforma altavoz de visibilización para los municipios y empresas de la Comunitat Valenciana». Así resumió Alfred Costa, director general d’À Pun, la vocación de servicio público sobre la que se construye el modelo de radiotelevisión pública valenciana, durante la primera de las jornadas del Foro de Municipalismo de Levante-EMV. 

Desde su reapertura, el ente ha defendido un periodismo con información «de proximidad, plural, veraz y de calidad», que se preocupa por contar «las cosas que pasan y hacéis en los pueblos» de la Comunitat Valenciana. Para difundir, ante todo, la actualidad olvidada por el resto de medios de comunicación. 

La apuesta de À Punt por la información local es, según Costa, la forma «más directa de conocer y escuchar las reivindicaciones de la ciudadanía, de los valencianos y valencianas». Sus demandas, sus preocupaciones y problemas saltan de la televisión o la radio al debate público, dando «importancia a la acción política local» y posibilitando «la participación de los municipios en la toma de decisiones» sobre asuntos que les afectan de forma directa.

Para dar altavoz a la realidad de los pueblos valencianos, ya sean de interior o de la costa, la radiotelevisión pública cuenta con sus tres delegaciones en las capitales de provincia —Castelló, València y Alicante— y, además, ha desplegado una red de corresponsalías en las comarcas de interior, «cosiendo la geografía mediante la información de calidad». Esta estrategia permite «poner en valor el mundo local» a través de la «presencialidad y la visibilidad de los pueblos más alejados de la metrópolis», relató Costa.

El directo general quiso remarcar el envío de «periodistas y cámaras allá donde hay una historia que contar». Puso como ejemplos recientes las coberturas informativas —en todas sus plataformas: televisión, radio y web— de acontecimientos tan relevantes como la pandemia de la covid19 o los graves incendios que calcinaron la Vall d’Ebo y Bejís durante el pasado verano. Tampoco quiso olvidarse del «inminente ciclo electoral que viviremos este 2023». «Hablaremos de asuntos que no contarán el resto de medios de comunicación», explicó refiriéndose a la cobertura informativa para las próximas elecciones municipales y autonómicas; una filosofía informativa de proximidad y de «cohesión social» que, según Costa, comparten con Levante-EMV. Esta cabecera cuenta con seis delegaciones comarcales en la capitales del Camp de Morvedre, l’Horta, la Ribera, la Safor, la Costera-Vall-la Canal y la Marina.

Costa aprovechó su intervención para recordar el convenio que mantienen con la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP) y que les permite «abrir una ventana informativa» a través de la red de emisoras locales y municipales. «Es un altavoz privilegiado para los alcaldes; no siempre tenéis esta oportunidad», argumentó dirigiéndose a los representantes de la Administración local presentes en el auditorio del Ateneo Mercantil.

Dinamizador económico

La actividad de la radiotelevisión pública valenciana genera un impacto económico tanto en la industria audiovisual como en la economía de los municipios donde se implantan la misma. «Nuestro compromiso con la Comunitat Valenciana va más allá de las tradiciones, las fiestas y el folklore; es también económico», defendió el director general. 

Una de las principales apuestas del ente público es la producción audiovisual producida por empresas valencianas, cuyo presupuesto asciende a los 30 millones de euros anuales. Esta inversión repercute, directamente, en la creación de empresas — «han crecido un 20%», explicó— , en la «generación de ocupación» y contribuye a dinamizar la economía de las comarcas en las que se implanta la industria audiovisual. Ésta se «instala en nuestros pueblos con un retorno económico impagable». Como ejemplo,Costa relató el impacto que el rodaje de la popular y exitosa serie L’Alqueria Blanca —se emite de forma diaria, de lunes a viernes, desde abril del pasado año— genera en la ciudad de Buñol y en las comarcas de la Hoya de Buñol y Utiel-Requena. Por otro lado, Alfred Costa recordó el papel de la televisión y radio públicas para potenciar el sector agroalimentario valenciano, defender los productos de kilómetro cero y visibilizar el éxito de los modelos empresariales valencianos que apuestan por el I+D+i. Señaló también la contribución en la difusión de la riqueza turística, medioambiental, gastronómica, cultural y patrimonial. 

«Continuaremos recorriendo cada pueblo y ciudad para explicar vuestras historias. Es la forma más fácil de convenceros de que nuestra radio y televisión son la voz de todos», concluyó.

Más de un millón de valencianos en À Punt

Según Alfred Costa, la cobertura informativa y de entretenimiento de la televisión pública valenciana se ve refrendada por la «respuesta positiva» de la audiencia de la Comunitat Valenciana. Los datos muestran que más de un millón de personas conectan con À Punt cada día buscando «aquello que les identifica sean de comarcas del interior o de la costa». Un ejemplo es la mascletà de Fallas, cuya retransmisión marcó récord el pasado lunes con un 22 % de share.