Riba-roja diseña una ciudad sostenible, accesible e inteligente

El Ayuntamiento de Riba-roja de Túria diseña la ciudad del futuro, tras una legislatura constreñida por la pandemia del coronavirus, con una serie de ambiciosos proyectos públicos enfocados, principalmente, a las áreas sociales, sanitarias, deportivas, infraestructuras y turismo. Un complejo socio-sanitario en la zona de Pacadar, la anhelada llegada del metro al centro del casco urbano, la ciudad deportiva del Quint o los planes de turismo que supondrán una profundización en la Riba-roja que afrontará los retos durante los próximos años. 

Sin duda, el primero de los proyectos municipales que ya se ha puesto en marcha se circunscribe en los más de 50.000 metros cuadrados de terrenos públicos de la conocida zona de Pacadar. Ubicada en el área oeste junto al casco urbano, albergará una residencia para las personas mayores dotada con 81 plazas y una residencia para personas con diversidad funcional con 40 plazas. En esta misma zona se construirá otro centro de salud, un área de rehabilitación y un punto Samu, de forma que se cubrirán las demandas que en este ámbito presenta actualmente la localidad. 

Con más de 6,4 millones de euros de coste, este proyecto está contemplado en el presupuesto de la Generalitat de este año. Un total de tres médicos de familia, que se sumarán a los once actuales, tres enfermeras, un pediatra, un fisioterapeuta, dos auxiliares de enfermería, un auxiliar administrativo y un celador son las prestaciones previstas. Este nuevo espacio urbano dispondrá además de zonas verdes y para la práctica deportiva.

Además de las áreas sociales y sanitarias, las infraestructuras y las comunicaciones ocupan otra de las prioridades del equipo de gobierno de Riba-roja de Túria y con la llegada del metro al centro del casco urbano como uno de los objetivos. De momento, la primera piedra ya se ha puesto con su inclusión en el denominado Plan de Movilidad Metropolitana (PMOME), en el que se incluyen su integración y simplificación tarifaria, abaratamiento de los precios, aparca-bicis cubiertos para los usuarios, aparcamientos disuasorios y, finalmente, el metro soterrado hasta el centro de la ciudad, cuyo plan de viabilidad ya ha visto la luz.

Estos proyectos se completan con otros de indudable importancia como la futura ciudad del deporte en el Quint, una de las zonas del área este con más de 150.000 metros cuadrados de extensión que albergará la práctica de deportes con la construcción de pistas de atletismo, patinaje y áreas de ciclismo, de forma que todas estas modalidades deportivas se puedan llevar a cabo con todos los requisitos exigidos. Por último, la ciudad ha recibido otros 2 millones de euros del Plan de Recuperación europeo que permitirá conectar el Barranc dels Moros, la pasarela del metro con el caso antiguo y el río de forma que se crea un eje bidireccional desde el río Túria hacia el casco urbano. 

El alcalde de Riba-roja de Túria, Robert Raga, asegura que «apostamos con toda claridad por construir una ciudad basada en las políticas de solidaridad con las personas que más lo necesitan, sostenible con nuestro medio ambiente y moderna con todos los servicios públicos que los vecinos demandan, con una equidad absoluta hacia el casco urbano y, también, con las diversas áreas residenciales existentes en el término municipal».