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Preparados para el peor escenario: hospitales locales y morgues o cierre de barrios

La Comisión de Protección Civil aprueba el protocolo municipal ante posibles confinamientos

Un agente de la Guardia Civil hace el alto a varios coches durante un control en Benigànim, al inicio del confinamiento del municipio. | PERALES IBORRA

La Comisión Territorial de Protección Civil de la Comunitat Valenciana ha aprobado el «Protocolo de actuación municipal ante una posible situación de confinamiento territorial», que dibuja todos los escenarios ante un hipotético agravamiento de la pandemia y planifica las medidas a adoptar por parte de los 542 ayuntamientos de la Comunitat Valenciana. Entre otros se prevé la posibilidad de instalar hospitales de campaña municipales, crear morgues locales en espacios de gran capacidad, y la posibilidad de confinamientos municipales -como ya se ha realizado en Benigànim, Elda o Petrer-, y hasta de urbanizaciones o edificios.

El documento, aprobado el pasado martes y al que ha tenido acceso Levante-EMV, prevé cuatro escenarios posibles: Confinamiento total de un municipio (1); Confinamiento total de un municipio más UCI colapsadas (2); Confinamiento de una zona determinada o de un barrio dentro de un municipio (3) y Confinamiento de un edificio o urbanización (4). La situación más grave descrita se produce en el escenario 2, en el que el supuesto municipio con elevados contagios queda confinado. Además, coincide con las unidades de cuidados intensivos (UCI) colapsadas por lo que «se prevé aumentar la prestación de servicios médicos a personas enfermas graves» a través de varias alternativas.

Una de ellas sería la de instalar hospitales de campaña o provisionales en el municipio, aprovechando «pabellones deportivos o zonas diáfanas». La otra opción consistiría en «medicalizar establecimientos hoteleros, opción que exige la colaboración de los respectivos propietarios». En el caso de que existiera «un alto índice de mortalidad determinará la instalación de morgues provisionales, aprovechando infraestructuras de gran capacidad de los propios municipios».

Protección Civil también advierte que «ante este escenario debe contemplarse un servicio de apoyo psicológico, por lo que se deben aumentar los esfuerzos en este campo». También se añade que «se deben reforzar los servicios sanitarios, los servicios sociales y organizaciones sin ánimo de lucro dedicadas a esta labora asistencial».

En el escenario 1 las medidas a adoptar ya son conocidas por la experiencia del confinamiento: cierre de centros sociales, casinos, bares y restaurantes (excepto comida para llevar), supresión de actividades colectivas y educativas. Los consistorios deben crear el Centro de coordinación operativa local (Cecopal) que, coordinado con el Cecopi autonómico, debe, entre otras necesidades, «asegurar el abastecimiento de primera necesidad de la población» y los equipos de protección necesarios para la Policía Local y miembros de Protección Civil. También se alerta sobre la posibilidad de que haya personas contagiadas y confinadas que «no cuenten con la ayuda de familiares y amigos» para activar «servicios de asistencia a domicilio» con todas las garantías para las personas que ayudan a cuidar.

205 municipios valencianos, sin plan frente a emergencias

Para afrontar las emergencias, la Comunitat Valenciana cuenta desde 2013 con el Plan Territorial de Emergencia, que debe tener réplicas locales con la aprobación de esta misma planificación a nivel local. Un plan territorial «son documentos que establecen la forma en la que se van a estructurar y organizar para hacer frente a las emergencias que puedan darse en un ámbito territorial (una inundación como las de la semana pasada o una pandemia como la de este año). De los 542 municipios de la C. Valenciana, 337 ya cuentan con este plan territorial frente a 205 poblaciones que no.

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