Que los hombres tengan una hora extra de reducción de jornada para la crianza de menores, poner fin la externalización de los servicios de cocina y limpieza de hospitales y centros escolares públicos, blindar la paridad en el Consell o favorecer el acceso al género infrarrepresentado a profesiones y carreras. Son algunas de las medidas que plantea la futura Ley Valenciana de Igualdad de la que Mónica Oltra ha presentado este jueves su anteproyecto.

En este sentido, la futura norma plantea un aumento de la "corresponsabilidad" en las tareas de cuidados y una de las medidas que propone para llevarla a cabo la vicepresidencia que dirige Oltra es ofreciendo una hora extra en la reducción de jornada a aquellos hombres que trabajen en la Generalitat y la hayan solicitado por motivos de crianza de menores, una forma de "discriminación positiva" para fomentar las "masculinidades igualitarias".

"Es un cambio de paradigma", ha indicado la consellera de Políticas Inclusivas en la presentación del anteproyecto al tiempo que ha destacado que es una norma "de vanguardia del feminismo de la generación actual". Esa generación actual podría interpretarse como una pulla hacia el feminismo considerado clásico y con el que Oltra ha tenido importantes diferencias. "No queremos la mitad del pastel, sino hacer uno nuevo con nuevos ingredientes", ha añadido.

Entre las medidas que prevé incluir está futura ley se encuentra también la internacionalización de los servicios de limpieza, lavandería y cocina de los hospitales y centros escolares públicos que en su mayoría están hoy externalizados, es decir, lo hacen empresas privadas. "No es casual que estos servicios, los más feminizados, estén externalizados", ha expresado la vicepresidenta quien propone que las personas que hagan estas labores en estos centros sean parte de las plantillas públicas.

Algo similar mirando hacia el sector hotelero privado. En ese caso, la Generalitat no tiene competencias para obligar al sector a no externalizar los servicios de limpieza, sin embargo, el anteproyecto plantea excluir de las ayudas públicas a aquellos establecimientos que tengan estos servicios fuera de sus plantillas y los lleven a cabo empresas privadas.

También a partir de la adjudicación o no de dinero público vía ayudas la Conselleria de Políticas Inclusivas pretende que las empresas fomenten la semana laboral de 32 horas así como la obligación de publicar las tablas salariales por edad y género para aquellas empresas de más de 50 trabajadores, una forma de hacer patente si existe o no brecha de género en las retribuciones.