El Botànic acelera en las Corts para aprobar cinco leyes pendientes

PSPV, Compromís y Unides Podem encarrilan la ley de viviendas colaborativas al pactar las enmiendas

Diputados de los tres partidos del Botànic en la última junta de síndiques.

Diputados de los tres partidos del Botànic en la última junta de síndiques. / José Cuéllar/Corts

Diego Aitor San José

Diego Aitor San José

A diferentes ritmos avanzan las cinco leyes que se encuentran en el trámite parlamentario. Despoblación, Participación, Diversidad Familiar, Viviendas Colaborativas y Comercio Sostenible no son solo términos que aparezcan en el debate político sino que son el título de las cinco normas que el Botànic trata de sacar adelante antes de que finalice la legislatura, además de las de Bienestar Animal y la de la Agenda Valenciana de Cambio Climático, listas a la espera de ser incluidas en uno de los dos plenos pendientes.

Más allá de estas dos últimas, cada una tiene su plazo y las probabilidades de que finalmente logren el sello de salir aprobadas con el visto bueno de las Corts varían entre unas y otras. En este sentido, la que ya tiene velocidad de crucero es la de Viviendas Colaborativas. La norma pondrá las bases regulatorias para impulsar modelos habitacionales con espacios de uso privado (habitaciones y baños) y una importante dotación de servicios comunes (lavandería, sala de estar o incluso cocinas comunitarias) siendo una alternativa a, por ejemplo, las actuales residencias de la tercera edad.

El proyecto legislativo lo presentó en octubre Unides Podem a partir del trabajo avanzado por la Vicepresidencia segunda y Conselleria de Vivienda vista la dificultad de que lograse salir adelante siguiendo el trámite en el Gobierno valenciano. La jugada parece que le saldrá bien a los morados que atisban la alta posibilidad de que reciba luz verde. El Botànic ha pactado y registrado sus enmiendas, todas conjuntas, sorteando uno de los principales obstáculos a los que se enfrenta toda norma cuando entra en la cámara autonómica.

El tres grupos que conforman el Consell apenas han tocado el fondo de la norma sino que han añadido algunas especificaciones como añadir que como mínimo el 50 % de las unidades privadas tengan cocina, garantizando el derecho de tanteo de la Generalitat para la futura adquisición del edificio o que la puesta en marcha de las cooperativas no tenga "ánimo de lucro". Ahora, estas enmiendas (pactadas por quienes tienen mayoría en la cámara) se someterán a votación en comisión y la ley pasará a pleno.

La comisión no se fijará hasta la próxima junta de síndiques el día 14 de febrero y el objetivo es que la norma en su conjunto vaya al pleno escoba que se prevé celebrar en marzo una vez el 22 y 23 de febrero se vote la enmienda a la totalidad que lleve Vox. El de la semana del 22 de febrero y el llamado 'escoba' de marzo son las dos últimas sesiones parlamentarias del año y todo apunta a que las votaciones se amontonarán a sus señorías.

En estos dos tendrán que salir las cinco leyes pendientes aunque difícilmente llegarán todas. Las otras dos que más posibilidades tienen de ser debatidas en el hemiciclo son la de Despoblación y la de Participación. En la primera ha puesto su máxima prioridad Presidencia y, por ende, el PSPV. Se encuentra en trámite de urgencia y el día 15 de febrero se acaba el periodo para presentar enmiendas. Se espera que la comisión en la que se voten se fije también el día 14 con el objetivo de que, si no hay enmienda a la totalidad, vaya al pleno del 22 y 23 de febrero.

Situación similar a la de la ley de Participación, un proyecto impulsado por la Conselleria de Transparencia que dirige Esquerra Unida. Su problema es que por el camino sí podría encontrarse con un intento de ser tumbada por parte de la oposición, lo que obliga a fijar un debate extra en uno de los dos plenos pendientes (más allá del de la semana que viene, que ya tiene el orden del día fijado). Su plazo para el debate de enmiendas finaliza el día 17, lo que apura los tiempos.

Más difícil lo tienen las leyes de Comercio Sostenible y la de Diversidad Familiar. Son las dos últimas que han aterrizado en el parlamento valenciano, a partir de la vía de urgencia, lo que reduce los términos a la mitad a partir del proceso de participación. En este se encuentran todavía. Esta semana acaba el plazo para fijar comparecencias de asociaciones y expertos. Tras estas, llegarán las enmiendas, su debate en comisión y su paso al pleno, un trámite para el que comienzan a faltar días.

A estas leyes se suman otras tareas pendientes a las que la actividad parlamentaria deberá dejar espacio y tiempo. Entre estas destacan los dictámenes de dos comisiones que se han cerrado esta semana (acoso escolar y efectos de los temporales), la todavía pendiente renovación de los órganos estatutarios que ha de pasar por pleno (aunque sea para votarse) o las propuestas para cambiar las leyes de Espectáculo y Carreteras con las que los socialistas tratan de tejer una legislación que avance en la abolición de la prostitución. Todo en dos meses y tres plenos.

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