El 80% de las residencias necesita enfermeras y no las encuentra

Las enfermeras se marchan de los centros para cubrir las vacantes del verano en hospitales y centros de salud del sistema público

Las vacaciones de médicos y fisioterapeutas se quedan sin cubrir y los residentes, sin estos servicios

Imagen de archivo de una residencia de mayores en la Comunitat Valenciana

Imagen de archivo de una residencia de mayores en la Comunitat Valenciana / F. Calabuig.

Mónica Ros

Mónica Ros

Las residencias de la Comunitat Valenciana buscan personal sanitario. El 80% de los centros necesita enfermeras. La fuga de estas profesionales del sector asistencial de la dependencia al sanitario es una constante que alcanza sus máximos en el periodo estival. Si reciben la llamada de la bolsa de empleo pública para cubrir vacaciones, una sustición o una vancante, aceptan el puesto. Aunque sea por poco tiempo. El problema esencial es que las enfermeras de residencias no tienen la consideración de personal sanitario porque no pertenecen a la Conselleria de Sanidad. Estas enfermeras están adscritas a la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas. Y eso supone "peores condiciones laborales en aspectos profesionales, remuneración económica, formación, reconocimiento, desarrollo o movilidad".

Así lo aseguran desde el Colegio Oficial de Enfermería de Valencia que recibe a diario ofertas de empleo de residencias que no encuentran enfermeras y enfermeros por la fuga que se está produciendo a hospitales y centros de salud. "El salario de las enfermeras de los centros de atención de mayores dependientes es inferior. Podemos hablar de hasta 300 euros al mes de diferencia (si se compara sueldo base y complementos) pero ya no se trata solo del sueldo. En una residencia, la enfermera debe asumir nocturnidad, turnicidad, festivos... A las enfermeras dependientes de Igualdad les cuentan las horas de las noches igual que las horas de día", explican fuentes del Colegio Oficial de Enfermería. Y eso que sindicatos y patronal, aprobaron nuevas tablas salariales para más de 15.000 trabajadores que dependen de conselleria de Igualdad para que pasaran a cobrar de 1.4450 euros a más de 2.100. Y ni con esas. Y es que la mayor parte del sector está en manos privadas y es decisión de las empresas pagar más o menos.

La sobrecarga asistencial, la precariedad salarial y la falta de reconocimiento de las enfermeras que trabajan en residencia conlleva a aceptar cualquier puesto de trabajo ofertado desde la Conselleria de Sanidad, ya que el objetivo es sumar puntos para aumentar los méritos y conseguir, antes o después, una plaza. "Si las enfermeras de residencia formaran parte de la Conselleria de Sanidad y las condiciones laborales y bolsas de empleo estuvieran unificadas este problema no existíría y no se daría una fiuga de perosnal tan evidente de unsector privatizado al sector público". Y es que el 75% de las residencias de la tercera edad están manos privadas y concertadas. Es más, de gestión pública y directa sólo hay en toda la Comunitat Valenciana 10 residencias públicas: cinco en Alicante (RPMD Alacant, RPMD Mariola, RPMD Torrevieja, RPMD La Florida y RPMD Pintor Emilio Sala), dos en Castelló (RPMD Lledó y RPMD Borriana), y tres en Valencia (RPMD Aldaia, RPMD Carlet y RPMD Silla). Ahora bien, en estas residencias de gestión públcia el problema de falta de personal sanitario es el mismo.

Sin médico ni fisioterapia

Al problema generalizado de falta de enfermeras se suma que, en muchas residencias, sobre todo las pequeñas, "hay puestos asistenciales que se consideran no sustituibles en vacaciones como médicos, fisioterapeutas o psicólogos". Es decir, estos profesionales directamente no se consideran sustituibles. "Estar sin médico en la residencia, supone una sobrecarga de trabajo para enfermería, que asume algunas funciones como trámites con farmacia, resultados de analíticas, etc. De igual modo, permanecer durante el verano sin fisioterapeuta deriva en un empeoramiento de la movilidad y aumento del riesgo de caídas, ya que en las personas mayores se evidencia la falta de ejercicio en su actividad diaria. En el caso de carecer de psicólogo, la enfermería acaba asumiendo algunas funciones que serían de esta profesión", denuncian desde le colegio oficial.

Homologar el título y trabajar el último año de carrera

Desde la Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas Dependientes de la Comunidad Valenciana (Aerte) aseguran que el problema residen en la "falta de profesionales" ya que "faltan enfermeras" por lo que "la solución debe pasar por dejar de poner parches y aumentar la oferta formativa ya que la mayoría de enfermeros dobla y trabaja en dos sitios. Es más, el presidente de Aerte, Jose María Toro, cree que hasta que se aumente el número de profesionales "se deben acelerar los procesos de homologación de títulos". "De hecho, nosotros ya hemos pedido que pueda trabajar quien está en trámite de homologar el título e incluso que pueda trabajar quien está en el último año de carrera", concluye.