PP y Vox maniobran para llevar al pleno una ley de 'Hablamos español'

Puede que los platós de televisión o las redes sociales se hayan alzado para una parte de la ciudadanía en los nuevos parlamentos, pero la pompa del hemiciclo, su tribuna en alto y los escaños que la rodean tienen algo que los hace irresistibles. Por eso no es lo mismo defender una ley en la sala de una comisión que en el escenario del pleno ante 99 diputados (o los que asistan) y por eso este martes la reunión de la Mesa de las Corts se alargó más de lo previsto y acabó con bronca entre los partidos que dan apoyo al Consell y la oposición.

PP y Vox amagaron en la Mesa de las Corts con cambiar el reglamento de la cámara autonómica para que las Iniciativas Legislativas Populares (ILP) se puedan exponer en sesión plenaria y no en comisión. La propuesta la presentó in voce la presidenta del parlamento, Llanos Massó, que reclamó efectuar un cambio que adaptase la normativa de funcionamiento de la cámara a la ley aprobada en 2017 y que permita que estas propuestas surgidas de la sociedad civil, y que han de pasar el filtro de una serie de firmas (10.000), sean debatidas en el pleno.

Pero la división de poderes es lo que tiene y las Corts, poder legislativo, no funciona como el ejecutivo por mucho que el cargo más alto sea la presidencia. Massó presentó una resolución para que se cambiara el reglamento, algo que apoyaron los dos representantes del PP en la Mesa. Sin embargo, la oposición protestó y recordó que el reglamento no se puede modificar por esta vía, sino que ha de pasar por comisión y plantearse como un cambio de ley, es decir, recibir el apoyo del pleno, procedimiento que la dirigente de Vox se había saltado y ante el que tuvo que recular.

Las prisas no fueron casuales, denunció la oposición. Más allá de que el asunto de la falta de concordancia entre la ley y el reglamento de las Corts durante siete años pueda clamar al cielo, en el registro se acumulan varias ILP al borde de dar el salto hacia el parlamento. Sobre la que más se explayó este martes el síndic de Vox, José María Llanos, fue sobre la de 'Hablamos español', una proposición de ley sobre la "libertad de elección de lengua", que ha contado con hasta 40.000 firmas para su tramitación, es decir, más de las necesarias para superar la criba.

Entre las propuestas de esta ley está que se pueda "elegir la lengua de todas las asignaturas entre las oficiales" (es decir, una modificación del plan de Plurilingüismo de la Generalitat con riesgo a situaciones paradójicas en materias como valenciano, lengua o inglés), que las administraciones "respeten la cooficialidad" y no impongan "barreras lingüísticas", la "apertura de la cultura a los creadores en ambas lenguas" así como "recuperar la oficialidad de los topónimos en español", cuestiones de Llanos de las que habló como un "compromiso" para Vox.

"Forzar el reglamento"

"Quieren forzar el reflamento de una manera unilateral porque le interesa a un partido", cargó el síndic de Compromís, Joan Baldoví. "Nos preocupa que la extrema derecha esté utilizando las instituciones para colar sus mensajes con la aquiescencia del PP", añadió el portavoz de los socialistas, José Muñoz. Ambos se referían a la proximidad ideológica de Hablamos Español con Vox, que la propia formación corroboró. Por su parte, los 'populares' se desentendieron de la polémica y su síndic, Miguel Barrachina, aseguró no saber nada.

No es, sin embargo, la única ILP que se encuentra a la espera de su entrada a debate del parlamento. La más polémica es la que registró Juan García Sentandreu, dirigente histórico de proyectos de ultraderecha y vinculados al blaverismo, que presentó una propuesta propia de la ley de Señas de Identidad. Entre sus peticiones, la prohibición del uso de País Valencià. Esta no cuenta aún con las firmas necesarias, aunque en el PSPV, la diputada Mercedes Caballero, ha cuestionado al vicepresidente primero, Vicente Barrera, si está preparando una ley propia de Señas de Identidad, como dice el acuerdo de gobierno, o si la propuesta por Sentandreu podría ser asumida.

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