El Consell rebaja el tiempo de pago a proveedores pero sigue con el segundo peor dato de España

La C. Valenciana reduce en seis días el plazo que tarda en abonar sus facturas, pero con más de 48 días de media sigue muy por encima del límite legal de 30

La consellera Ruth Merino, en un momento de su intervención.

La consellera Ruth Merino, en un momento de su intervención. / Levante-EMV

Mateo L. Belarte

Mateo L. Belarte

La Comunitat Valenciana es la segunda autonomía de España que más tarda en pagar a sus proveedores por los servicios prestados. En concreto, 48,47 días cuando el límite legal es de 30. Solo Murcia empeora el registro del Consell con casi 75 días. La cifra, correspondiente al cierre del mes de febrero y que ha sido publicada por el Ministerio de Hacienda este lunes, supone que la Generalitat ha recortado ligeramente su plazo medio para abonar sus facturas respecto a los 54,6 días de media que tardó en enero.

La tendencia a la baja coincide con la que se da en todo el ámbito estatal, aunque es menos acentuada en el caso valenciano. En España se reduce 8,5 días frente a las seis jornadas que recorta el Consell. Además, el promedio nacional está ya dentro de los límites legales (se sitúa en 28,4 días) mientras la Generalitat supera este registro en 20 días.

En el arranque de la nueva legislatura los plazos se mantuvieron relativamente estables pese al cambio de color en el Consell del pasado mayo. El Botànic dejó el período medio de pago en 23,12 días en junio de 2023, cuando todavía gobernaba en funciones la izquierda. En julio, ya con el Ejecutivo de PP y Vox, se inició un paulatino repunte y el año se cerró rozando los 35 días.

Pero se desbocó en el primer mes de 2024, cuando saltó de golpe a los 54,6 días de media, casi 20 días más. La consellera de Hacienda, Ruth Merino, negó que el brutal aumento tuviera relación con los impagos que se han ido produciendo en algunos ámbitos de la Generalitat a consecuencia del cambio del sistema informático de pago de las nóminas.

Merino achacó los datos previos logrados por el Botànic al "dopaje" financiero por los fondos extraordinarios recibidos en durante los ejercicios de 2020 a 2022 por motivo de la pandemia. "Ha existido un dopaje a la hora de tener una liquidez que ya se ha acabado", señaló la consellera, quien remarcó que el periodo de pago actual es el "habitual" si se compaña con años anteriores a 2020.