Bétera reclama al Ayuntamiento de València siete paneles religiosos robados en la Guerra Civil

El Centre de Estudis Locals ha demostrado que cuatro de ellos están instalados en la escalera posterior del consistorio de la capital

Han pasado 87 años desde que se asaltó y expolió la Iglesia de la Purísima Concepción

Amparo Soria

Amparo Soria

Una investigación del Centre de Estudis Locals (CEL) de Bétera y una moción aprobada por unanimidad en el pleno del pasado lunes del ayuntamiento, ha destapado un suceso patrimonial de lo más curioso. Siete paneles cerámicos de la Iglesia de la Purísima Concepción de Bétera fueron desmontados con el inicio de la Guerra Civil y custodiados por fieles, lo que provocó que las obras de arte de cerámica hayan estado desaparecidas durante 87 años. Sin embargo, ahora el misterio se ha resuelto: se encuentran en el Ayuntamiento de València y en el Museo Benlliure de la ciudad, y las siete van a ser reclamadas por el Ayuntamiento de Bétera para que sean devueltas a su lugar original.

En la moción aprobada, el consistorio se comprometió a "ejecutar y conseguir el retorno a Bétera de los paneles cerámicos desaparecidos", y una vez se ha demostrado que son de la localidad del Camp de Túria, "en el plazo de dos meses máximo desde su aprobación en el presente acuerdo, desde la Alcaldía y la Concejalía de Patrimonio, con el asesoramiento del CEL, presentará una reclamación formal de devolución frente al Ayuntamiento de València". Se presentará por registro de entrada o las vías necesarias, y se solicitará una reunión "amistosa" con los responsables de Patrimonio Histórico de València y un reconocimiento explícito por parte de la capital de que la verdadera procedencia de estos paneles es Bétera.

En concreto, hay dos lotes. El primero de ello son los cinco cuadros cerámicos que lucen en las paredes de los rellanos de la escalera de Arzobispo Mayoral. En concreto, son un credo formado por el Apóstol San Andrés, Santiago el Mayor, Santiago el Menor, Santo Tomás y San Felipe. Además, en los jardines de la casa-museo Benlliure se encuentra la Alegoría con Nave y la Alegoría con Peregrinos.

El contexto histórico de la moción está en manos de Toni Grande y Rafael Martínez, miembros del CEL. Explican que la Iglesia de la Purísima es Bien de Relevancia Local y un lugar donde, "independientemente de la fe", es propiedad de los beterenses.

Narran cómo estos paneles fueron robados del templo al estallar la Guerra Civil. Acogía en su interior un elevado número de paneles cerámicos y todo su zócalo era de vistosa azulejería, y atesoraba el Apostolado del Credo que ahora se encuentra en València. En origen eran doce, representando cada uno de ellos a un apóstol con un artículo de esta oración.

Robo y particulares

El conflicto armado "trajo numerosos actos vandálicos por los dos bandos". Es aquí "cuando se produce el asalto, expolio y desaparición de gran parte de los bienes de la Iglesia Purísima Concepción". Algunos fueron sustraídos fortuitamente y otros acabarían en domicilios particulares. Sin embargo, en 1937, una carta de la Presidencia del Consejo Municipal de València solicitaba al alcalde beterano, Juan Martí Torrent, que entregara todo el arte del municipio porque "quedará expuesto en el Museo Histórico, Arqueológico y de Bellas Artes Municipal de València".

Los paneles, en todo ese viaje en el tiempo y el espacio, han sufrido numerosas reposiciones como se detalla minuciosamente en el informe. Hay azulejos que cayeron y fueron repuestos por otros parecidos, pero se identifican "de manera irrefutable" los originales de Bétera.

"Consideramos que ha llegado el momento de hacer justicia y que, una vez más, aunque esta vez de forma contundente y definitiva, volvamos a dar voz al sentimiento de pertenencia que nuestro pueblo siempre ha demostrado para con los paneles cerámicos beteranos desaparecidos durante la Guerra Civil", dice el documento.