Un influencer de Vallada defiende la montaña frente al turismo irrespetuoso

Rixi Barberà (@alegriadepoble) conciencia a la ciudadanía ante el aumento del turismo rural y muestra la realidad de vivir en un pueblo

Rixi Barberà (@alegriadepoble) naturaliza el valenciano en sus vídeos

Perales Iborra

Uno de los planes más populares de ocio en la Comunidad Valenciana es hacer escapadas a la montaña. «Este finde nos vamos de ruta» es una frase que, probablemente, escuchemos a compañeros de trabajo o de estudios de vez en cuando.

Cada vez son más las cuentas de redes sociales como Instagram o TikTok que promocionan lugares «secretos» (o ya no tanto, después de su publicación), cuyo efecto es un turismo masificado que deja grandes cantidades de basura en parajes que, hasta hace poco, eran conocidos únicamente por los vecinos de los pueblos cercanos.

Rixi Barberà (@alegriadepoble) a los pies del Penyó, montaña emblemática de Vallada.

Rixi Barberà (@alegriadepoble) a los pies del Penyó, montaña emblemática de Vallada. / Agustí Perales Iborra

Ricardo «Rixi» Barberà (@alegriadepoble) es un joven de Vallada que está ganando repercusión en redes sociales con sus vídeos en los que pone en valor la montaña, la vida en el pueblo, la lengua y la salud mental. «Nos quejamos de que los pueblos se están muriendo porque ya no va nadie, pero cuando promocionamos un lugar, luego nos quejamos de que está masificado», comenta a Levante-EMV a los pies del Penyó, montaña emblemática de Vallada y su «rincón preferido».

«El problema no es enseñar un sitio, sino que no se conciencie a la gente para que sepa que ese lugar ya estaba ahí antes de que llegaran ellos. Toda la gente tiene derecho a visitar y admirar un paraje, pero tienen que respetarlo y no dejar veinte latas de cerveza y paquetes de tabaco tirados por ahí», sostiene Barberà.

@alegriadepoble comenzó a ganar seguidores en redes sociales a partir de un vídeo en el que expresaba sus inquietudes y «angustias» antes de comenzar en un nuevo puesto de trabajo. Su carácter abierto y su uso natural de la lengua, con un inconfundible acento de la Costera, ha llamado la atención de los más de 84.000 seguidores con los que cuenta ahora en Instagram.

Rixi Barberà (@alegriadepoble) conversa con Levante-EMV en el monte de Vallada.

Rixi Barberà (@alegriadepoble) conversa con Levante-EMV en el monte de Vallada. / Agustí Perales Iborra

En varias ocasiones le han dicho que, si publicara su contenido en castellano, «llegaría a más gente». Sin embargo, Barberà afirma que lo que le pintaban como una «barrera» se ha convertido en su «fuerte».

«Los pueblos son mucho más que un lugar al que huir de la ciudad los fines de semana»

Rixi Barberà (@alegriadepoble)

— Influencer y creador de contenido

El valladino defiende la vida en una localidad de unos 3.000 habitantes frente a los estigmas asociados a los ámbitos rurales: «Los pueblos son mucho más que un lugar al que huir de la ciudad los fines de semana. Hay quien viene de fuera y nos trata como a unos paletos». «Algunos me dicen: 'Xe, estàs allà al fondo!'», comenta sobre vivir en comarcas de interior como la suya.

También le preocupa el abandono de estos territorios porque considera que, aunque haya «menos oportunidades que en las ciudades», hay «más libertad y más calidad de vida». «La responsabilidad de dar vida a los pueblos es de las instituciones y, sobre todo, de la gente joven, porque somos los que huimos de aquí en busca de oportunidades. Pero hay que creérselo un poco: gracias a eso, yo he encontrado un futuro y una vida para mí aquí, en 'Vallà'», expone.

Para él, la montaña es su «vía de escape». «Me ha enseñado muchas cosas como la disciplina, una cosa que no se compra con dinero. Es una cuestión tanto física como mental. Cuando aprendes a disfrutar de la montaña, aprendes a disfrutar de la vida», cuenta. Durante una época en la que lo pasó «muy mal a nivel mental», iba todos los días a la montaña a caminar y escuchar música: «Dejaba allí todas las cosas malas y volvía a casa sintiéndome mucho mejor», confiesa.

Vista del Penyó de Vallada desde el paraje de les Ermites.

Vista del Penyó de Vallada desde el paraje de les Ermites. / Agustí Perales Iborra

Por ello, Barberà está «desencantado» con la clase política: «Creo que a las instituciones no les importa la montaña, sino otra cosa que también es de color verde, que son los billetes. Soy antisistema porque el sistema es una mierda», denuncia.

Sobre las manifestaciones del sector agrario

Del mismo modo, pone el foco en las recientes manifestaciones del sector agrario en España: «Me dan un poco de risa. Está bien que se manifiesten, pero habría que ver qué cale de agricultores son porque veo a muchos con chupas de estas de Pedro del Hierro, que tal vez tengan a cuatro trabajadores cobrando tres euros la hora. Está claro que tienen que manifestarse por el campo, pero todos unidos, todos a una».

Rixi Barberà conversa con Levante-EMV sobre la montaña de Vallada.

Rixi Barberà conversa con Levante-EMV sobre la montaña de Vallada. / Agustí Perales Iborra

«Me gustaría ver qué intereses verdaderos hay detrás de estas manifestaciones», mantiene el joven. Y añade: «Pienso que la tierra es de quien la labra, pero desgraciadamente es de quien no hace nada y recoge mucho, mientras que el que trabaja mucho no recoge nada».

Así, Rixi Barberà se considera el «representante» y el «number one» del pueblo: «Yo lo digo así de flipado: 'Vallà' es conocido por ser el municipio más endeudado de España —con una deuda per cápita de más de 9.000 euros debido a macroproyectos como el de Valpark—, pero yo he venido a ponerlo en el mapa», concluye.