El Puerto acelera hacia las cero emisiones con el reto de seguir siendo competitivo

Levante-EMV y la APV subrayan en una jornada los avances en innovación y sostenibilidad pero también las amenazas ligadas a la política ambiental de la UE. Los ponentes alertan de la pérdida de conectividad por el nuevo sistema de pago por emisiones 

Ponentes de la jornada

Ponentes de la jornada / Fernando Bustamante

José Luis García Nieves

José Luis García Nieves

Jornada sobre el puerto

Jornada sobre el puerto / Levante-EMV

Justo el día en que el ministro de Transportes, Óscar Puente, anunció la inminente autorización por parte del Gobierno de la nueva terminal norte en el Puerto de València, el Club Diario Levante acogió un encuentro para abordar el estado del enclave en las dos materias que definen este tiempo: la innovación y la sostenibilidad.

Como se vio en el encuentro, el Puerto vive un momento decisivo que puede condicionar el futuro de una infraestructura clave para el progreso valenciano. Ese fue el marco en el que se desarrolló el foro «Innovación en el entorno portuario y la reducción de la huella de carbono», organizado por Levante-EMV y la Autoridad Portuaria de València, inaugurado por la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, y con representación de la APV, el mundo empresarial y las universidades valencianas. El encuentro, moderado por el periodista de Levante TV, Juanma Romero, abordó tres dimensiones del momento actual.

Nuevo impuesto europeo

La primera es la gran preocupación por el impacto en el puerto y la economía valenciana de unas políticas ambientales mal diseñadas desde Europa, en opinión de los ponentes. El más contundente fue Vicente Pallardó, profesor de la Universitat de València y director de la Cátedra Valencia Port de Economía Portuaria de la UV. 

«El Puerto está trabajando de manera adecuada. Ejerce liderazgo en innovación y sostenibilidad. Lo que me preocupa es el entorno que generan otras instituciones. Y pienso a nivel europeo: hay que tener cuidado en compatibilizar el respeto al medio ambiente con la protección del empleo y el negocio en Europa. No podemos liderar materias como la sostenibilidad y perder posiciones en otras como la industria», inició Pallardó.

En el ambiente flota la gran preocupación por la inminente entrada en vigor de unas nuevas tasas medioambientales en los puertos europeos, conocido como Europe Trading System. El sector cifra entre 300.000 y 400.000 euros el coste extra por escala de barco en puertos como el de Valencia, frente a competidores cercanos pero no europeos, como Tánger.

«Puede haber una fuga masiva de barcos», apuntó Alfredo Soler, presidente de Propeller Club. «La teoría es premiar a quien menos contamina y penalizar a quien más contamina. Pero en realidad, no es así. No puedes decir que vas a premiar a quien no contamina cuando no hay soluciones tecnológicas más allá de las que ya están implantando las navieras. Toda la industria está por la descarbonización, pero debe ser de forma armonizada», dice sobre la normativa. El sector portuario teme que esta mecanismo, que cobrará derechos de emisión en función de la distancia de los trayectos de los buques, incentive la descarga en puertos como Tánger de barcos de América o Asia. Y se desplace el negocio de transbordo (transferencia de carga de un barco a otro) hacia puertos vecinos pero no europeos, en Marruecos o Egipto.

Tanto Soler como Pallardó coincidieron es que estas políticas, paradójicamente, obtienen el efecto contrario: contaminar más. ¿Por qué? Primero, porque pueden generar desvíos a puertos más asequibles pero más lejanos. Segundo, porque se incentiva a países con estándares ambientales mucho más laxos. Y un tercer impacto indeseado: la pérdida de conectividad que se traduce en pérdida de competitividad.

Pallardó añadió otro peligro, este en términos políticos: «Un liderazgo [ambiental] que destruya empleos puede ser mal visto por la sociedad. Y es algo que me preocupa bastante ahora mismo». «Es sorprendente que la UE no sea capaz de reflexionar sobre sus sectores estratégicos. Perdimos los paneles solares con una legislación avanzada pero sesgada en contra de lo europeo. Estamos perdiendo la industria del automóvil con una legislación errónea, y ahora lo mismo. Cuando estableces un mecanismo de penalización en tu área de influencia, necesitas mecanismos de compensación para los que no están en Europa. Si no, se producen dos consecuencias: vas a perder empleos en beneficio de terceros, y esos terceros son mas dañinos medioambientalmente. Por lo tanto, torpedeas tu objetivo. Es asombroso que Europa cometa el mismo error una y otra vez», lamenta Pallardó.

«Este es el mayor riesgo a corto plazo», insiste Propeller. «Una terminal norte, un acceso norte, no tienen mucho sentido si tenemos un desvío de tráficos como el que esta normativa puede provocar», por lo que piden medidas de alcance internacional y una moratoria europea hasta que todos vayan de la mano.

Puerto, tractor de Volkswagen

Durante la jornada también se destacó la potencialidad del puerto como tractor para la innovación y la sostenibilidad de la economía valenciana. En concreto, Juan Manuel Díez Orejas, jefe de Planificación Estratégica e Innovación de la Autoridad Portuaria, puso en valor la conexión puerto-ciudad que se observa en fenómenos como el ecosistema digital del entorno marítimo. 

«El puerto también tiene suerte de estar en València. Hay un ecosistema innovador floreciente, muy por encima de lo que nos tocaría por cuota en España. Y eso también se traduce en el ámbito portuario. Hace unos años lanzamos un ‘hub’ para atrae talento y startup, para emprender en el ámbito logístico portuario. Estamos en el lugar adecuado. Un puerto líder que es un oportunidad para emprendedores, y que capitalicen ambos: generar valor para las empresas logísticas y para el resto de la sociedad». 

Díez subrayó que hace pocas semanas Valenciaport ha firmado un acuerdo con dos de los puertos con ecosistemas de innovación más florecientes del mundo: Hamburgo y Halifax.

Por su parte, Eugenio Pellicer, director de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos, citó otro aspecto crucial. «La gigafactoria de Volkswagen está aquí por el puerto». «Aquí hay un creciente núcleo innovador de empresas que buscan ubicarse lo más cerca posible del puerto. Si jugamos bien nuestras cartas, se puede potenciar ese foco innovador alrededor del puerto en València».

Vocación de vanguardia

Enlazando con esta idea, los ponentes se refirieron también a una vocación del enclave por estar en vanguardia de todos estos procesos. «Tenemos una grandísima suerte en València de contar con unos gestores que tienen en cuenta a toda la comunidad portuaria en todos los procesos», dijo el representante de Propeller.

Así, el puerto se reivindica en vanguardia, por ejemplo, en cuestiones como la formación, como demuestra el grado en Logística y Transporte, o el primer postgrado de la UPV como experto universitario en innovación y digitalización del sector logístico portuario. «La colaboración y la trasferencia desde el inicio entre la APV y la UPV siempre ha sido grande. Desde profesores que son profesionales en empresas a estudiantes que están becados o en prácticas, finalizando carreras. En colaboración con la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) lanzamos hace dos años una formación específica a nivel logístico portuario y de transporte con un grado, el primer que se oferta en España en una universidad pública», señaló el responsable de la Politécnica.

La delegada del Gobierno, Pilar Bernabé

La delegada del Gobierno, Pilar Bernabé / Fernando Bustamante

El Puerto es vanguardia, también, en gobernanza. «Uno de los elementos claves del puerto es la transparencia, el liderazgo en facilitar información a la sociedad, generar indicadores para hacer entender los resultados que genera el puerto. Y ahí las universidades tenemos un rol esencial», expuso Vicente Pallardó.

Y, por supuesto, se subrayó la voluntad de la APV en liderar en innovación y sostenibilidad con ese horizonte, las cero emisiones netas en 2030. Juan Manuel Díez Orejas tomó prestado el concepto de ‘misiones’ que ha teorizado Mariana Mazzucato, con el ejemplo de la Misión Apollo. «La Nasa definió la misión de llevar un hombre a la Luna y traerlo de vuelta. Y ahí se generó innovación y nuevos productos que hemos disfrutado. Igualmente el objetivo de las cero emisiones nos ayuda a probar nuevas tecnologías».

En este sentido, el directivo citó tres hitos en la gestión del Puerto en los últimos 30 años. Como el proyecto «Infoport», que permitió desarrollar el primer ‘port community system’; el proyecto ‘Ecoport’, para implantar un sistema de gestión ambiental en las instalaciones europeas; y, ahora, el «H2Ports», para la implantación de hidrógeno como combustible alternativo en operaciones portuarias. «La innovación está en el adn del Puerto y no se va a ir de ahí», concluyó.

La apuesta estatal: 130 millones a proyectos de sostenibilidad

La delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, inauguró la jornada con una defensa apasionada del Puerto de Valencia. «Es la infraestructura que más aporta al PIB valenciano. Más de 50.000 familias viven gracias al empleo que genera», reivindicó.

Pero Bernabé también realizó una defensa apasionada del respaldo del Gobierno, justo el día en que Óscar Puente anunció el desbloqueo de la ampliación. «El Gobierno de Pedro Sánchez ha apostado siempre por la sostenibilidad y la innovación en el puerto. Lo vemos reflejado en los Presupuestos y en proyectos gracias a los Fondos Europeos en los que vamos a invertir más de 130 millones dirigidos al ámbito de sostenibilidad e innovación», dijo, al tiempo que citó la apuesta por la conectividad ferroviaria. «Hay que apartar debates antiguos en que se cuestiona el respeto del puerto al medio ambiente. No hay que caer en el error de la dicotomía entre competitividad y sostenibilidad. No hay competitividad sin sostenibilidad», concluyó la delegada.