Afabals y la Fundación «la Caixa» promocionan el envejecimiento activo con pacientes de Alzhéimer

El programa Petra persigue mantener la autonomía y prevenir la fragilidad en personas mayores a través de la actividad física

Una usuaria durante uno de los entrenamiento con la plataforma REHAMETRICS.

Una usuaria durante uno de los entrenamiento con la plataforma REHAMETRICS. / ED

Candela García

Candela García

Desde la Associació de Familiars de Persones amb Alzheimer i Altres Demències de Benifaió, Almussafes i Sollana (Afabals), que gestiona el Centre d’Estimulació La Llimera, se preocupan por analizar y dar respuesta a cada una de las necesidades de sus usuarios. De este compromiso, nace el Programa de Entrenamiento Terapéutico para fomentar la Resistencia y la Autonomía Personal (Petra), que persigue mantener la autonomía y prevenir la fragilidad en personas mayores a través de un abordaje centrado en la actividad física, mejorando la autopercepción y retrasando la institucionalización. 

La iniciativa, beneficiaria del programa de ayudas a iniciativas sociales que impulsa la Fundación «la Caixa», arrancó el pasado noviembre con las valoraciones integrales a 48 usuarios. En ellas, se tuvo en cuenta el estado global de la persona en fragilidad, funcionalidad, rendimiento físico, nutrición y cognición. En base a los resultados, también se elaboró un Plan de Intervención Individualizado (PII) donde se establecieron las líneas de actuación para cada paciente. 

Ahora, la iniciativa se centra en el Entrenamiento Terapéutico, con el que durante 44 semanas realizarán tres sesiones semanales en las que se trabajan aspectos físicos, cognitivos y funcionales. Este entrenamiento se realiza a través de herramientas clásicas, como pesas, bandas, pelotas y pedales, pero también a través de la realidad virtual. 

Con la plataforma REHAMETRICS, explica Cristina Miralles, directora de Afabals, los profesionales del centro estructuran las sesiones de rehabilitación, que quedan registradas en el sistema para posteriormente hacer una evaluación. Aunque todavía no ha acabado, ya están viendo los primeros resultados: «Notamos que está habiendo un incremento en la fuerza, la resistencia y el equilibrio de los usuarios», comparte Miralles. Respecto al riesgo de caída, que al empezar el programa «en muchos usuarios era alto», ahora está en un nivel «medio». Asimismo, el software les propone distintas actividades, en las que no solo tienen que ejercitar el cuerpo, sino también entrenan su «capacidad para la resolución de problemas».

El proyecto está previsto que finalice este noviembre, tras un año en marcha, con una jornada sobre el envejecimiento activo, en la que se organizarán charlas y una mesa redonda entorno a este concepto. «Queremos agradecer a la Fundación «la Caixa» por impulsar iniciativas sociales.Somos una entidad sin ánimo de lucro, así que para nosotros esta financiación supone poder materializar proyectos que de otra manera se quedarían en el papel. Para el colectivo con el que trabajamos, que se promueva el acompañamiento es una necesidad imperiosa», concluye Miralles.