Constitución del Congreso

El último fleco de la negociación con Junts: Exteriores solicita por carta el uso del catalán, euskera y gallego en la Eurocámara

A las 8.18 de la mañana, se registraba en el Consejo Europeo la petición formal del Gobierno: una carta firmada por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares

Exteriores solicita por carta el uso del catalán, euskera y gallego en la Eurocámara.

Prensa Ibérica

Juan Ruiz Sierra

Cuando el secretario general de Junts per Catalunya, Jordi Turull, anunció a primera hora de la mañana de esta jueves en la ejecutiva del partido que el apoyo a la propuesta del PSOE para la presidencia y la Mesa del Congreso ya estaba casi sellado, también avisó de que quedaba un último fleco. Los posconvergentes no se fiaban de las palabras de Pedro Sánchez el día anterior, en las que defendió que el catalán, el euskera y el gallego pudieran usarse en la Eurocámara. Querían, como reaccionó Carles Puigdemont tras escuchar el presidente en funciones, “hechos comprobables”. Las pruebas llegaron minutos después, permitiendo desbloquear el pacto parlamentario que da alas a la investidura de Sánchez, aunque todavía no se puede dar ni mucho menos por segura. 

A las 8.18 de la mañana, se registraba en el Consejo Europeo la petición formal del Gobierno: una carta firmada por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares. Si la iniciativa prospera, las lenguas cooficiales podrán emplearse en el Parlamento Europeo, sus representantes estarán legitimados para dirigirse en esos idiomas a las instituciones comunitarias y los documentos oficiales deberán ser también traducidos al catalán, euskera y gallego. 

El uso del catalán en la Eurocámara, al que se sumará ahora la posibilidad de emplearlo también en el Congreso de los Diputados, según el pacto al que han llegado el PSOE y Junts, es un asunto antiguo. El Gobierno de Sánchez ya pactó esta medida en julio del año pasado, durante una reunión de la mesa de diálogo con la Generalitat. La solicitud formal llegó poco después, en septiembre. Pero ahora la iniciativa tiene muchísima más trascendencia política que entonces.