«Somos un equipo pequeño y humilde, pero espero respeto para el Saguntino»

El Atlético Saguntino no pudo poner el broche al año con una victoria que pusiera tierra de por medio con la zona de descenso. La polémica derrota en Alzira (2-1) frente a un rival directo volvió a contar con protagonismo arbitral, que los rojillos consideran determinante a la hora de explicar el resultado.

Los romanos tuvieron el control del choque, pero los locales se aprovecharon de dos errores para adelantarse en el marcador. En la segunda parte con el marcador favorable, el Alzira se cerró atrás y frustró a los visitantes, que reclamaron hasta dos claros penaltis que el colegiado pasó por alto.

El técnico saguntinista explica que el rival «no quiso jugar y paró el ritmo del partido. Es la forma en la que plantearon, pero me sorprendió porque siempre quiere la pelota y es el claro dominador de sus encuentros». Esta vez «el único equipo que tuvo la pelota y controló el juego fue el Saguntino, pero en el fútbol pasa como en todo, el que menos se equivoca gana y nosotros nos equivocamos en dos acciones que aprovechó el Alzira».

Muro del Alzira

Tras el paso por los vestuarios, «nos vimos las caras con el muro del Alzira en defensa, que se limitó a proteger su área y buscar alguna contra. Nosotros no estuvimos bien en los últimos metros y tampoco tuvimos suerte con el arbitraje, porque pudo pitarnos hasta dos penaltis, pero el árbitro no quiso verla», añade el entrenador castellonense.

Con respecto a esta polémica, Sergi Escobar lamenta que «podríamos llevar 5 o 6 puntos más, pero queda toda la segunda vuelta y un partido de la primera en la que espero que esa suerte cambie para nosotros. Espero también que se tenga respeto al Atlético Saguntino, porque a pesar de que somos un equipo pequeño y humilde, la directiva hace un esfuerzo muy grande para mantener al equipo en una categoría como lo es Segunda RFEF. Deseo para el próximo año que el trato sea el mismo para todos, a pesar de que no seamos un equipo grande».

Ambición

Escobar hace balance de la primera parte de la temporada, en la que «acabamos fuera de peligro, pero después de conseguir el objetivo de la salvación tenemos que ser más ambiciosos hay que mirar más arriba que abajo». La meta para 2024 «es llegar con opciones de todo a las últimas jornadas».