Cheste es la mejor carrera del mundo

La caída de Jorge Martín hace añicos el sueño de tres campeones españoles y con pasado en la Cuna de Campeones

Los campeones de MotoGP, Moto2 y Moto3

Los campeones de MotoGP, Moto2 y Moto3

J.V.Belda

Apenas cinco vueltas duró el duelo por el título mundial de MotoGP entre el español Jorge Martín y Pecco Bagnaia. Y el sueño del pleno nacional en la foto de los campeones, y por primera vez con tres pilotos con pasado en la Cuna de Campeones. Con el italiano desde la pole por la sanción de última hora a Maverick Viñales (penalizado con tres posiciones por no atender la bandera negra y naranja en el warmup) y con Jorge Martín segundo a su rueda, parecía que habría batalla durante las 27 vueltas, pero un error en la segunda vuelta a final de recta en el que tocó a Bagnaia en una pasada de frenada, hizo caer al madrileño a la octava posición. Obligado a remontar, tuvo que meterse en otras batallas con Maverick Viñales, y con Marc Márquez por el sexto puesto. Pero a falta de cinco vueltas y en la curva 4, el de Pramac volvió a cometer un error y se llevó puesto a Marc Márquez, que salió por orejas en su despedida más amarga del Repsol Honda, aunque el catalán, todo deportividad y empatía, no le culpa ante lo que había en juego. Con Jorge Martín fuera de carrera, Pecco Bagnaia se aseguraba el título, pues aventajaba en 14 puntos al español tras la carrera Sprint del sábado, en la que este le había recortado otros siete puntos.

Desde el muro avisaron a Bagnaia que Jorge Martín estaba fuera de carrera, lo que hizo que el italiano se relajara y fuera superado por Brad Binder y Jack Miller, a falta de 14 vueltas para el final. Aunque el sudafricano cometió un error al irse largo y perdió cuatro posiciones. Miller, Bagnaia y Zarco pasaban a ocupar puestos de podio. Mientras tanto, Jorge Martín llegaba al garaje del Pramac sin quitarse el casco y entre lágrimas, donde el equipo trató de consolarle. A nueve vueltas del final, Miller se cayó cuando lideraba la carrera con más de medio segundo de ventaja sobre Bagnaia, que volvía a ponerse al frente de la carrera.

El reguero de caídas no cesaba en una carrera de eliminación, y a falta de tres giros solo quedaban en pista catorce pilotos. Bezzecchi, Enea Bastianini, Augusto Fernández, Savadori, Álex Rins y Pol Espargaró se añadieron a Márquez, Martín y Binder, aunque ‘Polyccio’ pudo reincorporarse y acabar decimocuarto.

Bagnaia , Di Gianantonio y Zarco ofrecieron una última vuelta de infarto, en la que el líder del Mundial y ya bicampeón supo mantener su posición para sumar su séptima victoria y celebrar su tercer título, tras el de Moto2 en 2018, y los dos consecutivos de MotoGP, en 2022 y 2023. Lo hizo al estilo NBA, con una canasta y mostrando los tres anillos en su mano derecha. Bagnaia es el primer piloto que logra defender el número uno en su carenado desde Mick Doohan en 1998, y el primero que lo logra en Cheste, que no veía repetir campeón desde Marc Márquez en 2019, pero nunca con dos duelos finales decisivos en años sucesivos.

Jorge Martín, tras felicitar a su equipo en el box por su magnífica temporada en la que ha tenido opciones hasta la última carrera, se fue hasta el corralito previo al podio a felicitar también a ‘Pecco’ Bagnaia en un gesto de deportividad que el público agradeció.

Márquez disculpa a Martín

Jorge Martín, que acarició el título hasta la última carrera, se mostró feliz por ello, a pesar de no haberlo podido pelear más que cinco vueltas, hasta su caída. «La verdad es que cualquiera te diría que siento tristeza, rabia absoluta o dolor, pero siento felicidad porque después del resultado, después de un momento duro, agradezco el equipo que tengo y la gente que tengo a mi alrededor y creo que esto es sólo el inicio, creo que me quedan muchos años para pelear por el campeonato. Nuestros planes eran hacer top tres y lo hemos hecho con creces, llegando hasta el último día en Valencia, metiendo más de cien puntos al tercero y con muchas posibilidades de ganar el Mundial y estoy feliz».

Marc Márquez, por su parte, habló de un «domingo muy emotivo,» por su despedida de Repsol Honda. «En algunos momentos, ha sido difícil contener los sentimientos. Lamentablemente, hoy no hemos terminado la carrera. Me sentía muy fuerte y sinceramente creo que hoy era posible un podio e incluso puede que más. No ha sido un error nuestro y no culpo a Martín porque estaba en modo ataque. Suele pasar cuando luchas por un campeonato».