El PORN prioriza retirar la paja del arroz pero sin descartar la quema y el fangueo

La nueva normativa del parque natural de l’Albufera cede a los agricultores la gestión de los rastrojos del arrozal al concluir la siega

Un agricultor de la Ribera Baixa quema la paja del arroz.

Un agricultor de la Ribera Baixa quema la paja del arroz. / © VICENT M. PASTOR

Joan R. Gimeno

A la hora de gestionar la retirada de la paja del arroz, el borrador del nuevo plan de ordenación de l’Albufera (PORN) prioriza la recogida de los rastrojos frente a la quema como «medida de fomento de una economía circular que permita el aprovechamiento de un subproducto y posible recurso económico adicional para el productor», aunque acepta que se mantenga la combustión de los restos agrícolas «en situaciones complicadas y en las zonas bajas para evitar la putrefacción y las emisiones de metano y mortandades de fauna». En esos casos, según puntualiza la normativa, estaría «justificada la excepcionalidad» pese a la prohibición europea de la quema.

En cuanto al fangueo, otro método tradicional que consiste en batir con un tractor de ruedas de hierro la superficie agraria ligeramente inundada de las parcelas para airear la tierra e incorporar al suelo la paja y los restos de la siega, la nueva ordenanza considera que al quedar enterrados los rastrojos «en un medio anaerobio encharcado, genera metano, que contribuye mucho más al efecto invernadero que el CO2 producto de su combustión», aunque no descarta por completo esta costumbre agrícola al asegurar que «puede funcionar como un método de control mecánico».

No más regadío

El nuevo texto legal sostiene que el mantenimiento de las actividades agrarias tradicionales, tanto de regadío como en secano, resulta compatible con los objetivos de conservación de paraje natural, aunque alerta de que la modernización de las infraestructuras o la introducción de nuevos cultivos pueden suponer un aumento en los consumos de agua o en el uso de agroquímicos que afecten a la calidad del Parque Natural. Las nuevas transformaciones al regadío se supeditarán «a la disponibilidad de recursos hídricos» y se establecerá un registro de fincas con indicación del uso al que se hallan dedicadas, con la finalidad de controlar los posibles cambios.

La nueva reglamentación establece como «prioritaria la conservación en condiciones de funcionamiento y naturalidad adecuadas de toda la red del sistema de riego» del arroz. Además, señala a los agricultores como responsables de gestionar los restos de la paja una vez concluido el periodo de cosecha antes de que se inunden los terrenos para «evitar anoxias en el agua», ya que la acumulación de paja en descomposición en el suelo puede «generar estrés sulfhídrico» con efectos negativos para el cultivo.

En el ámbito del parque natural de l’Albufera, se prohíbe la aplicación de productos fitosanitarios mediante la pulverización o cualquier otra forma de aplicación con la que puedan llegar al terreno agrícola. En el caso de la aplicación aérea de productos fitosanitarios o insecticidas, se requerirá «el informe favorable, preceptivo y vinculante» del servicio competente en la gestión del parque natural de l’Albufera. También se prohíbe la aplicación aérea de productos herbicidas. Excepto en suelo urbano, no se permitirá el tratamiento con métodos químicos de la vegetación existente en los bordes de acequias, canales, lagunas, ullals y masas hídricas de titularidad pública.

Exceso de nitratos y auditorías medioambientales

La administración fomentará entre los agricultores las prácticas compatibles con el medio ambiente y pondrá a su disposición las ayudas y compensaciones necesarias para su implantación. Se controlarán los tipos y dosis de abonado que utiliza la agricultura intensiva a fin de asegurar que no supongan riesgos para las aguas ni para la conservación del ecosistema. Respecto a la contaminación producida por nitratos utilizados en la agricultura, el PORN se compromete a poner en marcha un programa de acción para la Albufera, reconocida como «zona sensible», con el objetivo de reducir la presencia de nitratos y actuar preventivamente.

La implantación de empresas deberá realizarse en los suelos calificados como industriales y con clasificación adecuada por el planeamiento urbanístico. El PORN potenciará con carácter prioritario la realización de auditorías ambientales a las empresas radicadas en su interior. En el ámbito del Parque Natural no caben usos industriales ni nuevos desarrollos industriales fuera de suelo urbano, por tratarse de suelo no urbanizable protegido. También se regulará la actividad comercial en todo el perímetro del parque natural. Fuera de suelo urbano, solo se permitirán actividades comerciales ligadas al uso recreativo y turístico, así como a la venta de los productos que se elaboren en el propio parque natural. 

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