La eliminación de la caña del Xúquer mejorará la seguridad contra inundaciones en 13 pueblos de la Ribera

El proyecto, financiado con fondos europeos, prevé una inversión de 4,2 millones de euros

Las autoridades, con las cañas del río al fondo, en el acto celebrado esta mañana en Alzira.

Las autoridades, con las cañas del río al fondo, en el acto celebrado esta mañana en Alzira. / Perales Iborra

La eliminación de cañas en los tramos del Xúquer más próximos a los núcleos urbanos de trece localidades de la Ribera, de Sumacàrcer a Cullera, ayudará a reducir el riesgo de inundación en estos municipios, en lo que representa el proyecto más ambicioso de la historia contra esta especie invasora que reduce la biodiversidad para sustituirla por bosque de ribera al objeto de acercar el río a los ciudadanos a lo largo de los75 kilómetros del cauce a lo largo de la comarca. 

La selección del proyecto «Canya a la canya» por parte de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica supondrá una subvención de 3,7 millones de fondos europeos que deberán completar los ayuntamientos con un 5 % de la inversión hasta alcanzar los 4,2 millones, más el IVA, que cambiará el paisaje del río a la vuelta de dos años y medio, como ya informó Levante-EMV. Los trabajos de eliminación de caña, que previsiblemente arrancarán tras el verano, serán el primer paso de una actuación que debe estar acabada a finales de 2025.

«Por primera vez toda las Administraciones van a mantener una colaboración directa en la salvaguarda del Xúquer», expuso ayer el alcalde de Alzira, Diego Gómez, que ejerció como anfitrión en la presentación del proyecto, una iniciativa del Consorci de la Ribera, entidad que agrupa a las dos grandes mancomunidades comarcales, y la Fundación Limne, que cuenta con el respaldo tanto de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), como de la Generalitat Valenciana.

El director general del Medi Natural, Julio Gómez, recordó que la caña es una de las cien especies más invasoras del mundo y recurrió a un neologismo, «desencañar», para presentarlo como sinónimo de «desencallar» y recordar que, además del proyecto «Canya a la canya» en la Ribera, la conselleria ha previsto inversiones por importe de 13 millones euros en actuaciones similares en otras 57 localidades. Gómez comentó que se debe abordar el problema con una «mirada amplia» y esquivar posibles conflictos competenciales.

El presidente de la CHJ, Miguel Polo, señaló como aspecto positivo del proyecto su capacidad para sumar adhesiones y, si bien advirtió de que «acabar con la caña es muy complicado, y no sé hasta qué punto conveniente», apostilló, apuntó que lo importante es recuperar el río y que se ha decidido actuar en los tramos urbanos ya que será necesario un esfuerzo de mantenimiento. 

El presidente de la Mancomunitat de la Ribera Alta, Txema Peláez, incidió en que la actuación suponen «40 años de la inversión anual» que se viene realizando y defendió que «la Ribera sin río no es nada». Participan en el plan Sumacàrcer, Antella, Gavarda, Alberic, Benimuslem, Alzira, Algemesí, Albalat, Polinyà, Sueca, Riola, Fortaleny y Cullera.