Alzira también reclama a la CHJ que dé más anchura al barranco de la Casella en el punto crítico del puente

El alcalde señala que el desplazamiento del Pont de Xàtiva aguas arriba del Casella deja sin sentido el ramal de la CV-50 y aboga por eliminarlo

Enlace de la CV-50 con la antigua CV-41, junto al barranco de la Casella.

Enlace de la CV-50 con la antigua CV-41, junto al barranco de la Casella. / Perales Iborra

El Ayuntamiento de Alzira presentará alegaciones al proyecto de ampliación del barranco de la Casella, que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) somete en la actualidad a información pública, para que el cauce tenga «la máxima amplitud posible» a la altura del Pont de Xàtiva, que hoy representa un cuello de botella y un punto crítico desde el punto de vista de las inundaciones. El proyecto de la CHJ mantiene el carril de deceleración que conecta la CV-50 con la antigua CV-41 y si finalmente se desplaza el Pont de Xàtiva aguas arriba, en base a la propuesta que el consistorio ha elevado al área de Carreteras, ese ramal «no tiene ningún sentido», ha señalado el alcalde de Alzira, Alfons Domínguez, que entiende que existe por tanto espacio para dar al barranco una mayor amplitud.

Como ayer adelantó Levante-EMV, el ayuntamiento presentó el lunes a los empresarios del polígono de Materna una última propuesta de reordenación de la confluencia entre la CV-50 y la antigua CV-41 que aparca de momento la demolición del paso elevado de la CV-50 -Carreteras no contempla esta opción- y diseña la construcción del nuevo puente unos 150 metros aguas arriba del actual. El enlace entre la actual carretera de Carcaixent y el nuevo paso sobre el barranco se habilitaría a través de una rotonda que se ubicaría en las inmediaciones del frustrado centro comercial. El nuevo carril permitiría tanto el acceso como la salida de Alzira desde la plaza de Sant Judes y también la conexión con la CV-50, según explica el concejal de Urbanismo, Andrés Gomis. 

El gobierno municipal presentará este miércoles la propuesta a los vecinos de Materna después de haber logrado el consenso con los empresarios del polígono. El alcalde reveló que, en las conversaciones con la Conselleria de Territorio, esta alternativa parecía contar con el visto bueno del área de Carreteras.

El proyecto que estos días la Confederación expone a información pública mantiene el carril de deceleración

Alfons Domínguez ya dio por hecho en esa reunión que el ramal que baja de la CV-50 desaparecería en la reordenación de este enlace y, en esta línea, ha confirmado que el ayuntamiento presentará alegaciones para que la Confederación aproveche el espacio que hoy ocupa este vial para ganar metros de amplitud para el barranco. «Incluso haciendo el puente en el mismo sitio, tenían claro que no iba a pasar por ahí», incidió Domínguez.

A 27 metros de anchura

La Federació d’Associacions de Veïns d’Alzira (FAAVV) ya reclamó tras conocer el proyecto que la CHJ sometía a exposición pública que el cauce del barranco de la Casella se ampliara de los 20 metros previstos a la altura del Pont de Xàtiva a 27, una anchura similar a la proyectada aguas abajo.

La Confederación Hidrográfica ha previsto rebajar la cota del lecho del barranco para, con una ampliación mínima de la anchura, conseguir el paso de los caudales para una inundación de un período de retorno de cien años. Fuentes del organismo de cuenca justificaron esta solución señalando que una mayor ampliación del barranco en este punto también obligaría a modificar el malecón que protege Alzira en paralelo a la CV-50, una actuación que, indicaron, se pretende evitar.