Medio Ambiente da luz verde a la planta de residuos sanitarios de Guadassuar

La empresa que promueve una planta de tratamiento de residuos sanitarios en Guadassuar ha obtenido una declaración ambiental favorable para poner en marcha la actividad en unas instalaciones construidas hace años en el polígono industrial la Garrofera de Guadassuar, según la resolución de la dirección general de Urbanismo, Paisaje y Evaluación Ambiental fechada en septiembre, que acaba de publicar el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana.

El proyecto de construcción de esta planta impulsada por la empresa Tecnología Medio Ambiente (TMA), del Grup F. Sánchez, se remonta en el tiempo prácticamente dos décadas y siempre ha generado una fuerte oposición en los municipios del entorno -desde l’Alcúdia a Alberic pasando por Benimodo o Massalavés-y, en los últimos años, también del propio Ayuntamiento de Guadassuar. Se da la circunstancia de que la dirección general de Cambio Climático y Calidad Ambiental llegó a denegar en junio de 2018 la Autorización Ambiental Integrada (AAI) al proyecto que la empresa había retomado en 2015 y, pocos meses después, la dirección general de Evaluación Ambiental parecía dar carpetazo definitivo al mismo al declarar concluido el procedimiento y ordenar el archivo de las actuaciones.

El hecho de que el polígono no estuviera urbanizado -sigue en la actualidad sin los servicios urbanísticos- parecía por entonces un obstáculo insalvable.

El proyecto ha generado históricamente el rechazo de pueblos del entorno como l’Alcúdia, Benimodo o Massalavés

No obstante, un contencioso interpuesto por TMA que se resolvió a finales de mayo con una setencia del TSJCV favorable a los intereses de la empresa ha permitido a la mercantil reactivar el proyecto de este centro de gestión de residuos biosanitarios y transferencia de residuos peligrosos y no peligrosos, según el epígrafe técnico que identifica la actividad.

La empresa cuenta con una parcela de casi 4.000 metros cuadrados en el polígono de la Garrofera en la que ya construyó en su momento una nave distribuida en dos módulos que ocupa cerca de mil. Según detalla el expediente tramitado, las actividades que TMA pretende desarrollar en Guadassuar son la gestión de residuos sanitarios del grupo III -que engloban residuos sanitarios o infecciosos, restos anatómicos, sangre y derivados o agujas, entre otros- mediante tratamiento de esterilización y posterior trituración para convertirlo en un residuo asimilable al urbano; la esterilización de aparatos eléctricos y electrónicos, conocidos en el argot como (RAEE), procedentes de centros médicos que puedan estar contaminados biológicamente; almacenamiento en cámaras frigoríficas y transferencia de residuos sanitarios del Grupo IV citotóxicos y citostáticos -restos de sustancia químicas y medicamentos caducados- o la estabilización o inertización de medicamentos y residuos cosméticos mediante trituración.

La empresa también contempla utilizar estas instalaciones como centro de transferencia de residuos peligrosos y no peligrosos generados en pequeñas cantidades para optimizar su transporte a plantas de gestión externas.

La instalación de esta planta de tratamiento de residuos sanitarios en Guadassuar ha generado históricamente el rechazo de los municipios del entorno y, en paticular de l’Alcúdia, por la proximidad de este polígono industrial al núcleo urbano de Montortal.

La empresa no solo construyó en su momento la nave, sino que también llegó a equiparla, aunque los problemas urbanísticos que impidieron la apertura de la instalación provocaron que trasladara la maquinaria a otra planta que gestionaba en Terrassa.

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