La Ribera recibió 700.000 turistas en 2023

El balance anual del INE muestra la diversificación de destinos en la Ribera al recibir visitantes 46 de los 47 municipios

El 75 % de las personas que se alojaron en la comarca el pasado año eran de origen nacional, más de medio millón

Veraneantes en la playa de Cullera.

Veraneantes en la playa de Cullera. / Agustí Perales Iborra

Rubén Sebastián

Rubén Sebastián

Casi 700.000 personas descansaron al menos una noche en alguno de los alojamientos turísticos de la Ribera el pasado año. El balance anual del Instituto Nacional de Estadística (INE) cifra en 681.620 las pernoctaciones registradas en la comarca durante 2023. Un dato que muestra su potencial para atraer visitantes y la diversificación que ha experimentado el sector, pues, la práctica totalidad de los municipios recibió algún viajero.

Como ya avanzó Levante-EMV, el número de turistas creció el pasado año en Cullera. Y también lo hizo en el conjunto de la comarca, que casi rozó las 700.000 pernoctaciones turísticas. Es la medida que utiliza el INE, que si bien no es capaz de cifrar con exactitud el total de visitantes al obviar los que acuden a un lugar y se marchan de él el mismo día, sirve para comprobar el nivel de ocupación de los alojamientos turísticos regulados.

El 75 %

A pesar de que fueron decenas de miles las personas de nacionalidad extranjera que hicieron noche en la comarca en algún momento del año pasado, lo cierto es que la mayor parte de los visitantes fue de origen nacional: 511.438. O lo que es lo mismo, el 75 % del total. Los 170.187 turistas restantes se alojaron en la Ribera provenientes de un país extranjero.

Apartamentos y hoteles frente al mar.

Apartamentos y hoteles frente al mar. / Agustí Perales Iborra

Cullera es el líder indiscutible a la hora de atraer turistas. La localidad de la Ribera Baixa se ha especializado en ello y lo ha convertido en su motor económico. Una tercera parte de los visitantes que recibió la comarca en el año pasado se hospedaron en Cullera, que concentró 230.342 de las 681.620 pernoctaciones registradas.

Un tercio

Si uno de cada tres visitantes se decantó por Cullera, eso quiere decir que hay más de cuatrocientos mil que eligieron otro destino. El dato muestra, a la vez, el potencial de la ciudad de la Ribera Baixa como la capacidad del resto de municipios para potenciar sus atractivos. El crecimiento del turismo rural se encuentra, igualmente, detrás de uno de los datos más importantes que arroja el balance del INE: 46 de las 47 poblaciones de la comarca. Prácticamente todas. Cotes es la única localidad que no aporta pernoctaciones a la estadística.

Por detrás de Cullera, Alzira es la ciudad que registró más pernoctaciones a lo largo de 2023. Fueron 71.215. En su caso, el origen se reparte de forma más equitativa. Algo más de cuarenta mil llegaron a la capital de la Ribera Alta desde algún punto de la geografía española, mientras que treinta mil lo hicieron desde otros países. El visitante nacional representó, en consecuencia, el 57 % del total. Por detrás de ellas se situó Sueca. La capital de la Ribera Baixa atrajo a 66.048 personas a algunos de sus alojamientos el pasado año. El 80 % (unas cincuenta y tres mil) tenían nacionalidad española.  

Las tres ciudades mencionadas concentraron más de la mitad de los turistas de la Ribera. Sin embargo, localidades como Alberic, Algemesí, Alginet, Almussafes, Benifaió, Carcaixent, Castelló, l’Alcúdia, Massalavés, Montserrat, Sollana y Turís superaron las diez mil pernoctaciones el pasado año.

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