Carcaixent combatirá las desigualdades del colectivo gitano en pro de la inclusión

El Ayuntamiento de Carcaixent ha puesto en marcha un plan que tiene como objetivo garantizar la inclusión del pueblo gitano en la vida social y cultural del municipio. Con ello busca dar respuesta a la preocupante situación de vulnerabilidad que sufre su comunidad, con el analfabetismo, la difícil inserción laboral y el racismo como principales obstáculos.

Un informe que el Ayuntamiento de Carcaixent encargó a la Universitat de València ha realizado un análisis y un diagnóstico de la situación de la población de etnia gitana en Carcaixent. Un paso previo necesario para desarrollar la denominada como «Estrategia Local por la Igualdad y la Inclusión del Pueblo Gitano».

Según ha explicado el consistorio, el documento concluye que una parte relevante de colectivo gitano de Carcaixent «se encuentra en una situación de vulnerabilidad», lo que le sitúa «en una posición de desventaja y desigualdad en relación al resto de la población». Al respecto, el informe identifica los siguientes problemas: el analfabetismo y el abandono temprano del sistema educativo, la dificultad de inserción sociolaboral, las barreras de acceso a una vivienda digna, la distancia cultural y la falta de inclusión social (que afecta a los ámbitos sanitario, educativo y social) y el racismo social e institucional (vinculado con el antigitanismo).

El gobierno local ha manifestado que, una vez identificados estos problemas, se va a trabajar para «mejorar la inclusión social y las condiciones de vida de la población gitana» a través del citado plan. «Esta estrategia es una política pública comprometida, diseñada ad hoc para mejorar las condiciones de vida de las personas gitanas, visibilizar su historia y cultura e impulsar su participación en la vida social y cultural del municipio desde el respeto y la no discriminación», ha manifestado la alcaldesa y concejala de Bienestar Social, Carolina Almiñana.

Igualmente, ha detallado que la estrategia local se vertebra en cinco ejes que pretenden «actuar sobre el abandono temprano y las consecuencias de este; promover la empleabilidad, el acceso a la vivienda digna y a los recursos públicos; fomentar la convivencia, el intercambio mutuo y la participación en la vida social y cultural de Carcaixent; romper con los prejuicios y estereotipos y construir un imaginario positivo de la etnia gitana para eliminar el racismo y el rechazo social hacia el colectivo e intervenir para mejorar la atención integral desde los servicios públicos en la población gitana carcaixentina».