El 80 % de las cesáreas son acompañadas en Gandia al año de aprobar el protocolo

Bea Solanes, vecina de Tavernes de la Valldigna, no pudo contener las lágrimas cuando le informaron, a escasos minutos del nacimiento de su hija y cuando llevaba dos días ingresadas tratando de dar a luz de forma natural sin avances, que Iván Canet, su marido, podría acompañarla en el parto por cesárea.

Fue un momento histórico, ya que iba a estrenar un protocolo que el equipo médico del hospital Francesc de Borja de Gandia prácticamente decidía en ese momento, mientras se preparaba el quirófano para llevarla a cabo, al comprobar que se trataba de una intervención sin riesgo ni complicaciones.

Aunque hace décadas que el acompañamiento a los partos naturales está normalizado, ya que se lleva a cabo en salas llamadas paritorios y no quirófanos, no ocurría así con los alumbramientos por cesárea, en tanto que, al fin y al cabo, se trata de una intervención quirúrgica y se realiza bajo los estrictos protocolos que rigen una sala de operaciones.

Sin embargo, ese posicionamiento cambió en el centro de referencia de la comarca de la Safor un 20 de julio de 2022.

Desde entonces, el 80% de los nacimientos que se han realizado por cesárea han contado con el acompañamiento a la madre en el hospital Francesc de Borja de Gandia. Este porcentaje se refiere a aquellas intervenciones que se han llevado a cabo de forma programada. En el caso de las urgentes, es decir, aquellas en las que la gestante acude con algún síntoma que obliga a provocar el nacimiento pese a que no era el momento, han sido bastantes menos, un 20% del total de las que se han realizado, debido a que estas situaciones se producen en casos en los que sí que existe un mayor riesgo de complicaciones y, por tanto, solo el personal sanitario puede acceder al quirófano junto con la mujer que va a dar a luz.

En lo que va de año, el centro ha realizado un total de 280 cesáreas entre programadas y urgentes, de las que una mayoría han contado con personas que acompañaban a la madre en un momento tan delicado.

Desde el hospital Francesc de Borja de Gandia consideran que este protocolo no solo beneficia al bienestar de la propia madre, que en ese momento siente que alguien de su total confianza está a su lado apoyándola, sino del propio recién nacido, ya que tiene la posibilidad de practicar la técnica del piel con piel con la otra persona mientras finaliza la intervención a la madre, algo que antes no ocurría.

Después de Bea e Iván, que describieron el momento como «maravilloso», han sido muchas otras las madres y acompañantes que han podido vivir esa misma sensación que ellos estrenaron.

Condiciones para acompañar

Es el equipo sanitario que atenderá el parto el que, tras una valoración previa, decide si la cesárea se puede realizar con una persona acompañante o no.

A esta se le explican una serie de pautas y las condiciones que debe aceptar para poder acceder. Lógicamente, si durante la intervención sale alguna complicación, debe abandonar la sala.

El acompañamiento en la cesárea es uno de los muchos avances que ha introducido el hospital Francesc de Borja de Gandia en los últimos años en lo que respecto a la atención de los pacientes.