Condenado a un año y medio de prisión por abusar de una menor delante de unos amigos en Paterna

Los testigos aseguran que ni se percataron porque estaban mirando el móvil

Comisaría de Policía Nacional de Paterna, que detuvo al joven por los abusos sexuales a la menor.

Comisaría de Policía Nacional de Paterna, que detuvo al joven por los abusos sexuales a la menor. / Levante-EMV

La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Valencia ha condenado a un joven a un año y medio de prisión por abusos a una amiga, menor de edad, en una pinada de Paterna delante de un grupo de otros tres amigos. A uno de ellos también se le han aplicado medidas de mediación en la jurisdicción de Menores, ya que era menor en el momento de los hechos, mientras que los otros dos, que han declarado como testigos, aseguran que no se percataron de los tocamientos porque estaban despistados mirando el teléfono móvil. 

La sentencia impone también al acusado una medida de tres años de libertad vigilada y la prohibición de aproximarse a menos de 300 metros de su víctima y comunicarse con ella en modo alguno durante un plazo de tres años. En concepto de responsabilidad civil deberá indemnizar a la menor con 1.000 euros por los daños morales.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del 7 de agosto del año 2020, cuando el ahora condenado, que tenía en ese momento 19 años, se encontraba en una pinada de Paterna junto a tres amigos y la menor de 16 años, a la que también conocía.

Hechos probados

Estando sentados junto a una mesa en las proximidades de un camping, el acusado “con ánimo libidinoso le tocó el pecho por encima de la ropa”, según los hechos probados en la sentencia. A continuación, “cogió la mano de la menor y la llevó a sus genitales haciendo que los tocara por encima de la ropa”. Posteriormente se bajó los pantalones exhibiendo sus genitales delante de ella, subiéndose la ropa momentos después, según añade la sentencia.

La acusación particular, ejercida por la letrada Paula Grau, especialista en derecho de familia y penal, solicitaba dos años de prisión por un delito de abuso sexual. Tras valorar el relato de la víctima, el fallo ha considerado que su testimonio es suficiente para enervar la presunción de inocencia, aunque los amigos que estaban presentes aseguren que no vieron nada porque estaban jugando con el móvil y atribuyan el malestar posterior de la menor a un incidente por haberle escupido.