Al ritmo de Carlos Soler y Parejo

Javi Guerra marca a ritmo de récord. El joven centrocampista del Valencia CF se convirtió el sábado en el máximo goleador del equipo junto a Hugo Duro. Sevilla, Atlético y Almería. El de Gilet ha marcado tres de los nueve goles del conjunto de Rubén Baraja. Es decir, acapara el 33% de los goles de toda la plantilla. Una aportación clave que lo ha elevado a categoría de estrella del campeonato y que ha lanzado al equipo en la tabla de clasificación. Su fútbol, como sus goles, van a más.

El arranque goleador de Javi Guerra esta temporada es extraordinario. Tres goles en seis jornadas está al alcance de muy pocos. Su ritmo goleador es solo para elegidos. Lo lógico es que Javi no pueda mantener ese nivel de eficacia todo el año. Lo grande es que, por mucho que se tuerza la racha, está en proyección de mínimo 10 goles a final de temporada y eso son palabras mayores.

Javi está goleando a ritmo de los centrocampistas más grandes de la historia. Solo hay diez centrocampistas en los 104 años de la entidad d Mestalla que han acaba la Liga como máximos goleadores del Valencia. Carlos Soler lo hizo en las temporadas 20/21 y 21/22 con 11 goles respectivamente. El actual jugador del PSG tomó el relevo de los 11 goles de Dani Parejo en la 14/15 y los 9 de la 18/19. Pablo Aimar con 8 fue desde la mediapunta el máximo realizador de 02/03. El anterior precedente es un buen conocido de Javi Guerra: su entrenador y gran valedor Rubén Baraja. El Pipo firmó 7 en la Liga 01/02. Gaizka Mendieta llegó a los 13 en la 99/00 y Fernando Gómez Colomer (cuatro veces máximo goleador del equipo entre 1987 y 1991) alcanzó los 14 en la 88/89. A partir de ahí, Robert Fernández marcó 11 en la 84/85, Pep Claramunt otros 11 en la 74/75, Paquito García 6 en la 68/69 y Lelé Santiago 10 en la 35/36. Javi Guerra tiene todas las papeletas para estar la temporada ahí. Entre los grandes.

Guerra ha arrancado la temporada todavía mejor que la acabó. El de Gilet crece sin techo convertido en unos nombres propios del campeonato. El canterano marca la diferencia en el Valencia, pero también en primera división. El ‘8’ es el segundo máximo goleador del campeonato en el capítulo de centrocampistas solo por detrás del internacional inglés del Real Madrid Jude Bellingham. Solo hay un mediocentro que, de momento, es capaz de seguir el ritmo realizador de Javi Guerra en este arranque liguero: el venezolano del Girona Yangel Herrera también con tres.

Invictos si marca

El Valencia del Pipo nunca pierde cuando marca Javi Guerra. Su cómputo global de goles desde el año pasado ha servido para que el equipo gane tres partidos (Valladolid, Sevilla y Atlético) y empate uno (Almería). Sus dianas se traducen esta temporada en 3 puntos: dos en el triunfo (1-2) al Sevilla en el Sánchez Pizjuán y uno en el empate (2-2) del Power Horse Stadium. Su golazo a Jan Oblak, a efectos de puntuación, solo sirvió para sentenciar la goleada (3-0) al Cholo.

El consejo de baraja

El Pipo es una de las claves que explican el rendimiento goleador de Javi. Primero, porque le ha dado confianza desde el primer día a base de titularidades. Segundo, porque ha acertado con su posición de llegador explotando sus mejores condiciones. Y tercero, por los sabios consejos que le ha dado siempre. Desde el año pasado, Baraja no ha parado de repetirle al canterano que tenía que disparar más a puerta. Algo que ya hizo hace años con Dani Parejo a raíz de un reportaje de SUPER desde el mismo centro del campo de Mestalla.

El Pipo, al punto de partida

La jornada intersemanal emplaza a los equipos de Primera División a jugar tres partidos en apenas una semana. En el caso del Valencia, tras empatar el pasado sábado ante el Almería, el segundo compromiso será en casa y ante un rival que le trae muy buenos recuerdos a Rubén Baraja. Y es que la Real Sociedad, que visita Mestalla este miércoles a las 21.30 horas, fue el primer equipo ante el que el Pipo logró su primer triunfo como técnico blanquinegro.

Fue el pasado 25 de febrero, en su segundo partido a los mandos tras un debut con derrota ante el Getafe. El Valencia, tras el adiós de Gattuso y el ‘reexperimento’ fallido de Voro, vivía una situación clasificatoria más que delicada y estaba prácticamente obligado a sacar los tres puntos ante un rival de Champions. Los futbolistas se hicieron fuertes en las ideas de Baraja y lograron el triunfo desde la solidez defensiva. Un solitario gol de Igor Zubeldia en propia puerta dejó los tres puntos en Mestalla. Un Zubeldia, por cierto, que será baja este miércoles en el feudo valencianista debido a problemas físicos.

Aquella primera gran noche de Baraja sentado en el banquillo del estadio en el que se hizo leyenda volvió a llenar de fuerza a unos jugadores que llevaban una línea claramente descendente con ocho partidos seguidos sin ganar, de los cuales siete fueron derrotas.