La Universitat despeja de arbolado la fachada del histórico Colegio Mayor Luis Vives

Las palmeras y los ficus de gran porte del Colegio Mayor Luis Vives desaparecen del frente de fachada del histórico edificio, situado en el campus de Blasco Ibáñez y obra destacada de Javier Goerlich. La Universitat de València, propietaria del edificio de estilo racionalista catalogado como Bien de Relevancia Local, está llevando a cabo las obras de rehabilitación del edificio con la intención de dar nueva vida el colegio reconvertido en el nuevo Espai Lluís Vives. La intervención incluye también la parte exterior del edificio, el jardín del colegio, donde destaca el arbolado de gran porte existente, que estaba muy crecido tras años de abandono. La intención ahora de la Universitat es despejar al máximo la fachada del colegio, que está considerado una de las joyas arquitéctonicas del conjunto de las facultades de los años 50 y 60 de Blasco Ibáñez.

Fuentes de la Universitat aclararon ayer que no se ha talado ningún ejemplar. Se ha llevado a cabo su traslado y replantación en los espacios ajardinados de Tarongers y Burjassot. Las fuentes de la UV apuntan que cuentan con los permisos de Generalitat y del Ayuntamiento de València. Los desplazamientos se producen, explican, "porque el crecimiento de unos árboles que no son originales de la construcción del edificio, estaban afectando el muro perimetral del complejo que es un elemento protegido". Parte del muro, de hecho, ha sido derribado en la intervención que se está llevando a cabo.

La valoración del estado de los árboles aconsejaría, aseguran en la UV, la tala si bien la Universitat ha apostado por su conservación.

Antes del traslado de los ficus que presidían el patio del colegio y proporcionaban sombra, se ha llevado a cabo una poda intensiva con el objetivo de facilitar el transporte, traslado y replantación. Tanto la poda como el traslado han sido autorizados por la Concejalía de Parques y Jardines, según confirmaron fuentes municipales.

Las obras de rehabilitación del icónico colegio mayor de la avenida Blasco Ibáñez arrancaron en 2021 tras años sin uso y abandono del edificio, cerrado definitivamente en 2012 y que llegó a estar ocupado. El colegio se convertirá en espacio de servicios integrales para los estudiantes y dinamización cultural. La rehabilitación, según proyecto del arquitecto José María Tomás, ha estado precedida de un trabajo de consolidación estructural del edificio que presentaba problemas graves de estabilidad.

El colegio Luis Vives fue inaugurado en 1954 y durante años fue un referente cultural. La actuación que se está llevando a cabo, con un presupuesto de 17 millones de euros, es una rehabilitación integral, en la que se mantendrán elementos como la fachada, el vestíbulo y su carpintería, la escalinata y el falso techo. Los trabajos pretenden, según se explicó en la presentación del proyecto, "adecuar las zonas a las necesidades y mejorar los procesos y la colaboración entre servicios, con espacios abiertos y luminosos y salas compartidas y donde la tecnología estará muy presente".