Muere el hipopótamo de Bioparc a los 40 años

Raff procedía del antiguo zoológico de Viveros, donde estuvo 25 años

Muere Raff, el hipopótamo de Bioparc

Bioparc Valencia

Raff, el hipopótamo de Bioparc que procedía del antiguo zoológico de València, ha fallecido. Fue uno de los primeros animales en llegar a Bioparc tras pasar un cuarto de siglo en Viveros. En Bioparc ha disfrutado del máximo bienestar durante los últimos 15 años, según han recalcado fuentes del parque.

El equipo técnico de Bioparc tuvo que practicarle una eutanasia a Raff al detectar una afección en los riñones y debido a los graves, dolorosos e irreversibles problemas en las articulaciones de las patas. Para todo el personal es "una triste pérdida y solo queda la satisfacción de haberle ofrecido los mejores cuidados, así como mantener el mismo compromiso con su compañera Rigas y su hijo Gori".

Raff, un hipopótamo de 40 años

Raff era, sin duda, uno de los animales más populares para la sociedad valenciana. Durante 25 años pudimos conocerlo en Viveros, el antiguo zoológico de València, hasta que en 2008 se trasladó a Bioparc junto asu inseparable compañera Rigas.

Desde entonces Raff ha podido disfrutar en su nuevo hogar durante más de 15 años de una extraordinaria instalación para hipopótamos. Sus incurables problemas de salud, unido a una edad avanzada para su especie, pues tenía 40 años, han motivado que el equipo técnico haya tenido que practicarle una eutanasia.

Tras varios años con diversos procedimientos y medicación para aportar el máximo bienestar ante los evidentes trastornos en sus patas y la dificultad en sus movimientos y desplazamientos, que le provocaban intenso dolor, se efectuó un exhaustivo reconocimiento veterinario.

Con el objetivo de realizar diversas intervenciones, se anestesió al animal, lo que permitió llevar a cabo una serie de pruebas y exploraciones necesarias por parte de los profesionales de Bioparc junto con especialistas en veterinaria del zoo de Basilea (Suiza) y de las Universidades de Viena (Austria) y del CEU Cardenal Herrera de Valencia.

Las analíticas y radiografías fueron rotundas y confirmaron el diagnóstico de artrosis irreversible y sin posibilidad de tratamiento, así como una afección en los riñones, por lo que la prioridad fue evitarle un sufrimiento inútil a Raff por más tiempo.

Raff, su compañera Rigas y su hijo Gori, en Bioparc.

Raff, su compañera Rigas y su hijo Gori, en Bioparc. / Bioparc Valencia

Para el grupo que se encargaba de su cuidado, así como para todo el personal de Bioparc, la muerte de Raff "ha sido un duro golpe, pues era un animal muy querido". En este sentido y en su recuerdo, el parque quiere compartir esta "gran pérdida" con todas las personas que durante tantos años han mostrado su cariño y admiración hacia el hipopótamo.

Ahora, en la cueva de Kitum, donde se recrean los impresionantes grandes lagos y humedales africanos, podemos contemplar a la hembra Rigas y a Gori, el último de los más de 10 hijos de Raff.

Bioparc participa en el programa internacional para la conservación del hipopótamo (Hippopotamus amphibius), especie catalogada como vulnerable a la extinción en la Lista Roja de la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) y la descendencia de Raff continúa esta labor en distintos parques de animales europeos.