La Policía desmantela tres asentamientos en el viejo cauce y detiene a seis personas

La Policía Nacional, conjuntamente con la Policía Local, han desmantelado tres asentamientos en el viejo cauce del río y han detenido a seis personas, una de ellas en busca y captura y las otras por la Ley de Extranjería. Además, fue necesaria la intervención de los servicios sociales para trasladar a una de las personas identificadas a un albergue municipal, ya que, al parecer, se encontraba herida.

Según fuentes municipales, una de las intervenciones ha sido en la llamada Casa del Agua, en cuyo primer piso se había montado un campamento en condiciones de insalubridad extremas. Allí han sido identificadas 18 personas que accedían al recinto a través de cuerdas. Tres de ellas han sido detenidas por la Ley de Extranjería y una más por encontrarse en busca y captura.

Otro de los puntos intervenidos ha sido el Puente de Campanar, donde se han producido 9 identificaciones y una detención por la Ley de Extranjería también.

Y finalmente, se ha desmantelado un campamento de 14 tiendas de campaña bajo el puente de Ademuz y se ha identificado a 15 personas, con un detenido por la Ley de Extranjería.

Servicios de limpieza

Una vez levantados los asentamientos, han entrado en acción los servicios de limpieza, que han retirado tres camiones de desechos, con 1.500 kilos de basura y 2.000 kilos de enseres y muebles. Especialmente complicada ha sido la intervención en la Casa del Agua, pues no hay acceso al primer piso y se dejará la limpieza para el día de hoy.

Además, los Servicios Sociales han trasladado a una de las personas identificadas a un albergue municipal. Su situación, al parecer, era de extrema vulnerabilidad, pues estaba herido.

Durante toda la jornada ha habido patrullas a caballo asegurándose de que no se montaban de nuevo estos campamentos en otros puntos del cauce.

Puntos más problemáticos

Según fuentes municipales, estos tres asentamientos eran los más problemáticos que había en el cauce. No se ha podido confirmar si se intervendrá en otros puntos del río.

El viejo cauce es lugar habitual de refugio de personas sin hogar, muchos de ellos inmigrantes que acuden a València en estos meses para participar en la recogida de la naranja. Las construcciones que salpican el cauce, así como los puentes, son los lugares escogidos para montar sus "tiendas" a falta de una alternativa mejor. Y en muchos casos se trata de personas sin documentación perseguidas por la Ley de Extranjería.