El ayuntamiento fuerza el debate: ¿tiene sentido la supermanzana de la Petxina?

La política municipal de la última semana ha estado marcada por la conversación en torno a un proyecto que el PSOE reivindica con orgullo y la alcaldesa tacha de «fiasco» y «feo». Hasta ahora la polémica se reducía a las multas y el mobiliario, pero ayer el ejecutivo ensanchó el debate hablando de una posible reversión del urbanismo táctico. Sería –en todo caso– tras los cinco años de financiación europea

Un coche mal aparcado en la supermanzana de la Petxina

Un coche mal aparcado en la supermanzana de la Petxina / Miguel Angel Montesinos

La bronca por los coches en la supermanzana de la Petxina ha escalado a una velocidad inverosímil. Seis días después de la queja vecinal, rentabilizada políticamente por la oposición, el concejal de Movilidad y Seguridad Ciudadana, Jesús Carbonell, ha dejado en el aire la continuidad del proyecto una vez finalicen los cinco años de financiación europea a contar desde el inicio de las obras.

Según Carbonell, los vehículos estacionados sobre las cruces dibujadas en el suelo demuestran que los vecinos no se adaptan a esta propuesta de urbanismo táctico consolidada en otros lugares como Barcelona, y la vía de los hechos –multas a diario–, no tanto la subjetividad política, justificaría el retorno a un diseño más convencional. 

Sin embargo, dentro del plazo señalado solo cabe estudiar qué modificaciones permite Europa sin comprometer sus fondos y a partir de ahí clarificar la señalética o habilitar zonas de aparcamiento complementarias con la peatonalización. Es ahí donde está el ayuntamiento. En el estudio de las mejoras de lo que consideran un proyecto «desastroso y feo». 

Porque tanto se ha embarrado el debate en Calixto III y Palleters que tanto Catalá como Carbonell han entrado a valorar, ya no solo su funcionalidad, sino también la estética de la plaza diseñada por Ibán Ramón. Dicen que el mobiliario es feo y envejece mal. Y también explican –responden a la oposición en realidad– que, pese a todas sus reticencias con el proyecto, el equipo de gobierno no ha movido un solo elemento de todos los que hayan instalados en este perímetro de asfalto arrebatado al coche.  

Polémica por fases

Dos son los puntos de fricción entre gobierno y oposición. Uno es este. El mobiliario. El PSOE denunció ayer que la primera edil ha retirado cinco maceteros y pivotes que impedían el estacionamiento y el paso de vehículos privados por la zona peatonal de la supermanzana de la Petxina. «No hay más que coger el plano del proyecto original y comprobar en la misma plaza que falta mobiliario porque ha sido retirado», dijo Sandra Gómez. 

«Lo que ha dicho el PSOE es fake», contestaron fuentes municipales, y explicaron incialmente se instalaron en total140 jardineras, de las cuales permanecen 139 según había constatado la inspección del consistorio. «Falta una jardinera por un vallado de obra de un edificio en Palleter con Literato Gabriel Mir», añadieron las mismas fuentes. 

El otro choque se produjo a cuenta de las sanciones. Los socialistas hablaron de excesiva permisividad con los vehículos estacionados en la supermanzana, los cuales estarían desnaturalizando un proyecto pensado para el peatón. Llegaron a fotografiar un todoterreno con varias multas colocadas en la luna pero sin que se lo llevara la grúa. O no se multa o las multas no sirven para nada, lamentaron. 

En el ayuntamiento, por su parte, alegaron que la Policía puso 20 multas en el primer trimestre de 2024 pese a que solo recibieron dos llamadas vecinales, y ayer el concejal Carbonell añadió: «La policía va continuamente, pone multas y retira coches, sin embargo hay actitudes contumaces de unos vecinos que siguen aparcando día tras día». Esa indisciplina sirve ahora para ensanchar un tema que no parece mostrar signos de agotamiento. Primero fueron las multas, después el mobiliario; ahora el debate se aparta de los inmediato y alcanza toda la profundidad: ¿tiene sentido revertir la supermanzana de la Petxina? En la tensión entre su buen o mal uso estará la respuesta.