Ucrania confirma que ‘Mario’ fue encarcelado por los rusos hace un año

El United Center, el instituto gubernamental que se encarga de seguir el rastro de «los defensores de Ucrania que están en cautiverio del estado agresor y de las personas ilegalmente privadas de su voluntad» como consecuencia de la invasión rusa, ha certificado que el jubilado valenciano Mariano García Calatayud, conocido en tierras ucranianas como «Mario» al facilicitarse así su pronunciación en el idioma autóctono, está preso por las autoridades soviéticas, que se han negado hasta ahora a confirmar que permanece ingresado en una cárcel de la República de Crimea, que fue anexionada por Rusia en 2014. El Defensor del Pueblo de España, por otra parte, ha reabierto la queja por la falta de iniciativas diplomáticas que planteó la familia y los amigos tras haberse cerrado en falso el expediente al fiarse de una noticia falsa que anunciaba su supuesta liberación. 

Tatiana, pareja del exjefe de la brigada de obras del Ayuntamiento de Carlet hasta que fue detenido por los rusos en una plaza de la ciudad de Jersón, ha recibido la documentación oficial del organismo estatal ucraniano encargado de seguir el rastro de los desaparecidos. «Como resultado de las actividades del United Center, de las medidas de contrainteligencia del Servicio de Seguridad de Ucrania y de las interacciones con organismos estatales y personas, le comunico que se ha recibido información confirmatoria sobre la privación ilegal de la libertad de Mariano», señala la misiva.

Archivan el caso del jubilado preso de Carlet al fiarse de una noticia falsa

El United Center también afirma «estar en permanente contacto con el Estado y las fuerzas del orden del país para continuar y coordinar la búsqueda con el objetivo de la recuperación lo más rápido posible de los defensores de Ucrania que se encuentran en cautiverio». 

Tras ser apresado el 19 de marzo de 2022, Mariano García fue trasladado a la prisión de Simferopil y encerrado en la celda 187, según el testimonio aportado a finales de septiembre por otro preso que compartía el calabozo con él. También aseguró que había adelgazado mucho y que a sus problemas cardiacos se habían añadido otras afecciones. Sin embargo, los responsables rusos de la prisión negaron que estuviera recluido allí. Supuestamente semanas después, a principios de año, el jubilado que residía hasta 2014 en Benimodo fue trasladado a otra cárcel cercana. 

La salud del jubilado de Carlet se deteriora en una fría cárcel rusa

La familia y los amigos no han recibido desde que desapareció ninguna prueba irrefutable sobre su paradero y estado de salud. Mariano nació el 2 de febrero de 1948. Hoy tiene 75 años. «Por su edad y salud tememos por su vida», admite Paco Santiesteban, amigo que se ha convertido en el portavoz de los allegados del exfuncionario de Carlet ante los medios de comunicación y las instituciones. El entorno del jubilado se quedó de piedra hace unas semanas cuando el Defensor del Pueblo les comunicó que había cerrado el caso. La institución dio crédito a una noticia falsa sobre su liberación publicada hace un año y cerró el expediente.

Santiesteban ha logrado que se reabra y reclama nuevamente que el Ministerio de Asuntos Exteriores «negocie su liberación mediante un intercambio de presos». El caso sigue estancado y el tiempo avanza de manera inexorable.