Con el lema “Agricultura. Profesión de futuro. Esencial, única y nuestra”, la Mancomunidad del Interior Tierra del Vino ha realizado esta campaña para defender y poner en valor el sector primario, tan importante para esta comarca como para la Comunitat Valenciana.
Testimonios reales de nueve representantes de la comarca
La campaña de la Mancomunidad Interior Tierra del Vino se basa en nueve testimonios reales de mujeres y hombres que han hecho una apuesta por la agricultura y/o la ganadería como profesión.
Cada uno representa a un municipio de la comarca —Camporrobles, Caudete de las Fuentes, Chera, Fuenterrobles, Requena, Sinarcas, Utiel, Venta del Moro y Villargordo del Cabriel— y todos muestran realidades y perfiles diversos, desde los que apostaron en su inicio de vida profesional por la agricultura o la ganadería como Gerardo Pérez o Carlos Viana, a los que optaron por otra formación muy distinta pero que, en su momento, decidieron regresar por calidad de vida o vínculos familiares, como Raúl Navarro o Mercedes Ruiz, y emprender.
Otros ya orientaron su formación desde el inicio al mundo agrícola, como Noemí Arroyo, Verónica Romero o Luis Berlanga, o decidieron sumarse al grupo de jóvenes agricultores como Alba Castillo y Victoria Aranda.
Edades y motivaciones distintas, formados en diferentes disciplinas y con realidades diferentes, pero que comparten el vínculo con la tierra y sus antepasados.
Nos cuentan en nueve píldoras, que se difundirán por redes sociales para llegar especialmente a los más jóvenes, que estamos ante una profesión de futuro, pero muy poco reconocida socialmente.
Hoy en día, dicen, “la imagen del agricultor sigue siendo la de una persona que no ha sido capaz de hacer de otra cosa o la de un paleto”, afirma Berlanga, algo que la convierte en una profesión no aspiracional para los más jóvenes.
Ven el origen de ese deterioro en que desde hace muchos años se ha dicho en las familias que lo mejor era abandonar la tierra y salir a trabajar fuera a las ciudades o industrias. Y ello pudo ser adecuado a la realidad del siglo pasado, pero no a la actual, en la que hay más personas cualificadas de las que puede asumir el mercado en las ciudades, estando el campo mucho más tecnificado y avanzado sin personas que lo trabajen.
Rompiendo estereotipos
Esta acción pretende poner su granito de arena para eliminar estereotipos a través de testimonios reales que reivindican que “en el campo hay trabajo como para que se pueda vivir bien” o “la dificultad o penosidad de la tarea agrícola se ha vuelto muy asumible gracias a la tecnología y maquinaria existente”.
Insisten en la importancia de la formación, inicial y continua, para ser un agricultor competitivo que integre la tradición con la innovación. Destacan que es conveniente salir fuera a formarse para poder regresar y enriquecer el territorio.
Como ventajas o beneficios para quien decide apostar por la profesión encontramos el ser felices rodeados de naturaleza, sintiéndose libres, conectados con los ritmos de los días y las estaciones, criando a sus hijos en el medio rural y conservando lo que sus antepasados sembraron y cultivaron.
Los acontecimientos vinculados a la pandemia nos han recordado que es una profesión esencial, pues “sin la agricultura, la ciudad no come”, así como que el desplazamiento a las zonas rurales de muchos profesionales que teletrabajaron ha servido para descubrir los beneficios de la vida en el mundo rural.
Desde esa aproximación mucha gente ha comprobado que los principales mantenedores del ecosistema son los agricultores y que son los auténticos guardianes del medio ambiente y el paisaje.
Cultura vitivinícola desde hace más de 2.500 años
Esta comarca del interior de la provincia de Valencia tiene en la vitivinicultura una trayectoria milenaria y cuenta con una de las primeras DOP registradas de España con vinos reconocidos internacionalmente por su calidad.
La DOP Utiel-Requena ha hecho en los últimos años una importante apuesta por la ecología, sin olvidar la importancia de la innovación integrada con la recuperación de las tradiciones y labores que hicieron única su vitivinicultura.
Además, la comarca cuenta con la Escuela de Viticultura y Enología de Requena, que el pasado año celebró sus 60 años cultivando conocimiento en este ámbito y que imparte la especialidad de Viticultura y Enotecnia que ha sido cursada por profesionales procedentes de toda la geografía española.
Uno de los antídotos para la despoblación
Finalmente, se persigue empezar a poner remedio a la enfermedad que asola el medio rural que es la despoblación y la falta de relevo generacional que pone en peligro la continuidad de este sector económico.
Para ello, además de desterrar viejos estereotipos, es necesario hacer un llamamiento para que se dote al medio rural con las infraestructuras y servicios necesarios que permitan a los jóvenes y familias con niños quedarse o volver a desarrollar sus vidas en el territorio.
Mesa sectorial de agricultura
Esta iniciativa nace desde la Mesa Sectorial de Agricultura constituida desde el Proyecto Experimental de Empleo ADAPT@+T 21, enmarcado en el programa Avalem Territori de Labora, siguiendo los objetivos fijados por el Acuerdo Territorial por el Empleo y el Desarrollo Local impulsado por la Mancomunidad del Interior Tierra del Vino.
Este programa de la Generalitat Valenciana pretende hacer partícipes a los territorios en la construcción de su futuro partiendo del diálogo social y un diagnóstico territorial. La Mesa Sectorial de Agricultura tiene como objetivo identificar las necesidades y retos de este sector estratégico en la comarca para aportar soluciones, siempre desde la gobernanza participativa.
