El Nou d'Octubre, la fiesta de los valencianos, llega hoy marcada por dos circunstancias que la hacen especial. La primera es la presencia por primera vez en los actos institucionales en el Palau de la Generalitat de un presidente de Gobierno y la segunda, la tensión generada por las imágenes aún reciente en la retina de la sociedad valenciana de los graves incidentes vividos en la manifestación vespertina del año pasado con agresiones de simpatizantes ultraderechistas contra manifestantes y periodistas que seguían la marcha autorizada que convoca la Comissió Nou d'Octubre.

En ese clima de tensión, seis manifestaciones o concentraciones, de diferentes signos políticos, han sido comunicadas a la Delegación de Gobierno para la jornada de hoy en diferentes horarios y recorridos aunque en muchos casos muy cercanas entre sí.

La extrema derecha de España 2000 desiste de su protesta, pero invita a los suyos a unirse a otras «valencianistas». Según mensajes en redes, muchos podrían adherirse a la que saldrá de la plaza de San Agustín de València hora y media antes que la de la Comissió Nou d'Octubre. Un factor de riesgo más.

En ese ambiente de tensión, los conductores que entraban ayer por la mañana a València por la V-21 se encontraron un decorado tétrico a la altura de Alboraia. Al menos tres muñecos de cartón con la bandera independentista catalana colgaban de postes eléctricos de madera, ya en desuso, que jalonan la autovía.

Los monigotes, con la estelada en pecho y espalda, aparecían colgados del cuello como si estuvieran ahorcados, aunque alguno estaba también bocabajo sujetado por los pies.

La aparición coincide con la víspera de la celebración del 9 d'Octubre y la convocatoria de numerosas manifestaciones anticatalanistas en la tarde del martes que han disparado la tensión. La Guardia Civil investigaba ayer la aparición de los muñecos, que a mediodía ya habían sido descolgados y según han informado fuentes de la Benemérita se ha abierto una investigación sobre los hechos. El cronista fallero Pepe Herrero ha escrito en redes sociales en tono irónico: «Se ve que algunos amantes de las tradiciones querían mostrar a todos los que vengan de Cataluña el origen de las fallas de València con los llamados ninots de tiro que se colgaban en las calles y hay quien se ha molestado. No lo entiendo. Yo que pensaba que las tradiciones les gustaban».

Pintadas en puntos de la ciudad

Además de los muñecos, este lunes algunos puntos de la ciudad de València aparecieron con diferentes pintadas. Los muros del puente de la Trinidad cerca de las Corts Valencianes lucían consignas como «9-0. No passaran» con pintura roja.

Mientras, Pedro Sánchez se convertirá en el primer presidente de Gobierno que asiste a la celebración institucional del Día de la Comunitat Valenciana. El jefe del ejecutivo estará en el acto institucional que se celebra en el Palau de la Generalitat, la entrega de sus distinciones y el discurso que pronunciará el president, Ximo Puig. Este año la Generalitat reconoce con la Alta Distinción al dispositivo de acogida del Aquarius y a la exministra Carmen Alborch, en un acto en el que también premiará al Valencia CF en su centenario, a las rectoras de la Universitat de València, Mavi Mestre, y de la UJI, Eva Alcón, y a las ilustradoras Ana Juan y Paula Bonet, entre otros. Ayer, los grupos con representación en las Corts valoraron la visita de Sánchez y señalaron que esperan que conlleve compromisos con las reivindicaciones valencianas.

Al respecto, el portavoz de Compromís, Fran Ferri, señaló que se debe «aprovechar» la participación de Sánchez en el acto institucional para trasladarle las exigencias valencianas como «el trato justo en la reforma del sistema de financiación, inversiones justas y la deuda histórica».

La presidenta del PPCV, Isabel Bonig, instó a Sánchez «a cumplir con las reivindicaciones de los valencianos». En similares términos se pronunció el portavoz adjunto de Cs, Juan Córdoba. Le alegra la asistencia de Sánchez aunque esperan que se acuerde del corredor y la infrafinanciación.

El síndic del PSPV, Manolo Mata, destacó la presencia como el hecho más importante que puede ocurrir este Nou d'Octubre. Antonio Estañ (Podemos) cree que los anuncios a Puig han de estar en los presupuestos.