La Generalitat descarta más desalojos y abre la puerta a controlar el perímetro del incendio esta noche

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, acaba de afirmar que el pronóstico del incendio de Villanueva de Viver es bueno tras haber superado con éxito una tarde "extremadamente complicada". Con estas declaraciones, Puig se refería al lapso de tiempo que ha transcurrido entre las 16 y las 18 horas de esta tarde, cuando las fuertes rechas de viento y la extrema sequedad del ambiente he hecho que se vivieran "momentos de enorme dificultad en lo que se ha puesto a prueba prueba todo el dispositivo de control dadas las malas condiciones meteorológicas".

Pese a las rachas de más de 50 kilómetros por hora y a la reactivación de varios focos, el president de la Generalitat ha querido dejar claro que se ha mantenido la línea de contención prevista desde hace varias jornadas para salvaguardar las poblaciones más cercanas y el parque de la Sierra de Espadán. De hecho, y pese a la situación vivida esta tarde, el perímetro sigue prácticamente sin alteración. el fuego ha calcinado 3.800 hectáreas en un perímetro de unos 40 kilómetros.

Previsión meteorológica para el optimismo

Desde la Generalitat Valenciana, insisten en que la previsión meteorológica para las próximas horas es optimista. Se espera un descenso de las temperaturas y un aumento de la humedad, lo que supondrá una ventana de oportunidad para intentar estabilizar el fuego y asegurar el perímetro para cuando vuelva a cambiar el viento a poniente, previsto para las 4 de la madrugada.

Ximo Puig, que se ha desplazado esta tarde para conocer de primera mano el avance de los trabajos, ha sido quien ha explicado esta mejora. "Ahora mismo se abre una ventana de oportunidad porque vcmbian los vientos y bajan las temperaturas. A las 4 volverá el poniente pero confiamos en que en ese momento hayamos controlado el perímetro". "La mejora de las condiciones meteorológicas a partir de las 20 horas abre una ventana para asegurar el perímetro del incendio".

Durante su comparecencia ante los medios de comunicación tras visitar el centro de control en Barracas, Puig ha reconocido que a primera hora de la tarde el incendio ha tenido una evolución muy desfavorable. "El momento más difícil ha sido de 16 horas y las 18 horas cuando dos puntos se han reactivado por la fuerza del viento que ha superado esa línea que desde el principio se había mantenido".

El viento complica la extinción del fuego y los bomberos luchan por evitar que las llamas pasen del barranco de la Maimona

Sin más desalojos

El equipo de extinción quiere aprovechar la venta térmica ofrecida por la bajada de las temperaturas prevista para esta noche y, por eso, desde la Generalitat Valenciana descartan nuevos desalojos y evacuaciones, tal como estaba previsto o preparado inicialmente en le caso de Cirat y Torrechiva.

Durante toda la noche se seguirá trabajando en los puntos más estratégicos como el barranco Maigmona y las zona de Montán y Montanejos. El objetivo es mantener las líneas de control para evitar el avance del perímetro. Para ello, el equipo de extinción ha sumado también maquinaria pesada en el entorno de Cirat y Montán para establecer áreas de defensa y discontinuidad que hagan más complicado que el fuego pueda extenderse en caso de que lleguen hasta ellas.

En cuanto a la previsión de los vientos para mañana, Puig detalla que el poniente soplará hasta mediodía y que entonces se registrará otro cambio que, en principio, permitirá mantener el control sobre el incendio.

Con ello, el presidente cree que se inicia una nueva etapa en la extinción del incendio.

Pese a este optimismo, el presidente subraya que hay muchos puntos con llama con mucho combustible disponible y que, por eso, no se puede hablar de estabilización.

Por último, el responsable de la Generalitat ha querido hacer hincapié en que uno de los problemas que ha llevad a este incendio es la deshumanización de los espacios y el abandono del medio rural.