Siete de cada diez valencianos prefieren ser ingresados en un hospital público

El papel que desempeñaron durante la pandemia se ha traducido en una mayor confianza en los últimos años

Un 43 % de personas optan por ir al médico de pago cuando se trata de una consulta

El grado de satisfacción con la sanidad pública se ha resentido por culpa de la pandemia

Interior de una planta de hospitalización del centro público de Sant Joan.

Interior de una planta de hospitalización del centro público de Sant Joan. / PILAR CORTES

Siete de cada diez valencianos prefieren ser hospitalizados en un centro público frente a uno privado, el 72 % en concreto. Son un 12 % más de los que elegían público para ingresar en 2010 y todo pese a la crisis reputacional que supuso el atasco por la pandemia de covid con los problemas de acceso a la Primaria, los retrasos en pruebas diagnósticas, para visitar a especialistas y para operarse de algo no urgente con el aumento de listas de espera. Así se desprende del informe realizado por la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad (FADSP) que hace una evaluación de la atención especializada en toda España y que ha sido presentado hoy.

La valoración de la hospitalización en los públicos sube pero los valencianos son los cuartos por la cola en esta preferencia, por debajo de la media española que se eleva al 75 %, tres de cada cuatro personas. Solo hace falta ver el porcentaje en otras comunidades: el 85 % de cántabros prefieren ir a un hospital público; en Galicia es el 84,2 % de personas; el 84 % de castellanoleoneses o el 83,9 de vascos. A la cola están Baleares, con un 67,9%; Cataluña y Andalucía.

El impacto de la pandemia

Aunque no se llegue a los niveles de otras comunidades, ser ingresado en un hospital público frente a un privado tiene ahora mejor prensa entre los valencianos que tenía en 2010 (cuando lo elegía un 60,27 % de personas) y está por encima también de los que así pensaban justo antes de la pandemia, un 70 %. Pese a todos los problemas que la covid generó en el sistema público y que han tenido que sufrir los pacientes, la pandemia es precisamente el motivo que explicaría este aumento.

Así se apunta en el informe y así lo ha verbalizado esta mañana en rueda de prensa el portavoz de la FADSP, Marciano Sánchez Bayle, que ha considerado "probable" que la experiencia de la pandemia haya influido ya que los "hospitales públicos fueron determinantes" para abordarla, pero ha lamentado que pese a esto la Atención Especializada tienda a la privatización y no esté recibiendo "la respuesta que se merece".

Con todo, el grado de satisfacción general que tienen los ciudadanos con el sistema sanitario público se ha resentido por este impacto directo de la pandemia (para mal) en todos los niveles. La satisfacción ha bajado del 6,82 que se registró en 2019 al 6,46 de 2022, casi la misma que se tenía en 2010 y precisamente por este atasco de pruebas y en el acceso a los especialistas, la contratación de pólizas de seguros privados se ha incrementado de forma importante en los últimos años hasta llegar a casi uno de cada cuatro valencianos. En el último año el porcentaje de valencianos con seguro privado alcanzaba el 22,70% mientras que en 2011 la cifra se situaba en el 15,97%.

Un 57 % prefieren ver al especialista de la pública

Aun así, los que prefieren ser visitados por especialistas de la pública superan a los que optan por los especialistas de la privada aunque aquí los porcentajes se acercan. Según este informe de la federación de asociaciones de la sanidad pública el 57,1 % de valencianos prefiere ir a un especialista de la pública, en la media de España. El porcentaje está por encima, pese a todo, de los que preferían consultas públicas sobre privadas en 2019 (56,3) y en 2010, con hasta diez puntos más. La adhesión a la pública en las consultas externas crece pese a que el tiempo de espera para poder accder no está en su mejor momento. 

Según este informe, el tiempo medio de espera es de 87 días para tener cita con el especialista, por encima de la media de España y la mitad de los que están esperando lo hacen más de dos meses, también por encima de la media de España. El informe apunta a que estas cifras, en verdad, podrían ser incluso más altas ya que esta lista de espera para ver al especialista "solo recoge la demora para la primera consulta y no las de las sucesivas, que habitualmente suelen ser mucho mayores".

Baja el número de camas disponibles

Pese a que se prefiere, cada año más, ser ingresado en un hospital público, desde la FADSP han alertado del "déficit" de camas hospitalarias en el parque público nacional, además con una tendencia "preocupante" a la baja de camas instaladas pero también de las funcionantes, las que están disponibles para ser ocupadas, cifra que todo los veranos se resiente por la práctica de la administración de "cerrar" salas de hospitalización para agrupar recursos y hacer así frente al verano de mejor manera con menos personal.

Así, según el informe, en 2021 la Comunitat Valenciana tenía instaladas 13.509 camas en todos sus hospitales, 11.505 en la pública y 2.004 en centros privados. Sin embargo, no todas estaban operativas. De las 13.509 camas, solo estaban operativas 12.062: 10.418 en la pública y 1.644 en la privada. Además estas camas operativas son menos de las que había en 2010. Según el informe, la caída de camas en funcionamiento en esos 11 años ha sido más acusada entre los hospitales privados que han perdido un 6,43 % de habitaciones abiertas, frente a la pérdida del 1 % de camas abiertas en los públicos.

Desde la federación piden incrementar «de manera importante» el número de camas disponibles para llegar al objetivo de tener entre 4,5 y 5 por cada 1.000 habitantes. «Es necesario que en ninguna comunidad haya menos de 3,5 camas por 1.000 habitantes», apuntan en el informe. En la Comunitat Valenciana no se llega: en 2021 había 2,67 camas instaladas por 1.000 habitantes y 2,39 en funcionamiento.