Vandalizan la sede de la asociación Lgtbi+ Lambda en València

La puerta de la asociación Lgtbi Lambda, en València, amaneció este lunes vandalizada y con el cartel medio arrancado de la puerta, según ha denunciado la entidad en redes sociales.

Se trata del primer ataque que sufren en su nueva sede situada en la avenida Primero de Mayo en València después de "un año de convivencia pacífica", según lamenta la entidad en un cartel colocado en la puerta de la sede en el que piden apoyo a los vecinos y vecinas de la zona para encontrar a los responsables. El ataque ha sido denunciado a la Policía Nacional.

Lambda es una histórica entidad que lleva 36 años luchando por los derechos de las personas LGTBI+ en València. Cualquiera puede unirse para realizar voluntariado, y la entidad ofrece asesoramiento, atención psicológica, apoyo legal o pruebas rápidas de VIH entre otros servicios en pos de los derechos del colectivo Lgtbi.

Lamentablemente, no es el primer ataque que ha sufrido esta asociación a lo largo de su historia, aunque sí el primero en la nueva sede. La entidad está acostumbrada a que este tipo de actos vandálicos se repitan con relativa frecuencia. Pintadas en la sede o en la puerta, además de algún destrozo.

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Silicona en las cerraduras

Cuando han ido a abrir esta mañana se han encontrado con que han intentado "arrancar de cuajo la placa, pero al no poder la han reventado y han dejado un trozo en el suelo".

Fran Fernández, coordinador de Lambda, ha indicado que interpondrán esta tarde una denuncia, tras reunirse la ejecutiva, y aunque ha dicho que no les corresponde a ellos evaluar la intencionalidad o no, ha añadido: "Es curioso que la única vandalizada de toda la calle sea la nuestra".

La sede de Lambda ha sufrido numerosos ataques en otras épocas, llegando a vivir tres en manos de un mes, incluso con silicona en las cerraduras de la asociación para evitar que pudieran abrir sus puertas, como sucedió hace unos años.

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Intención "evidente"

Fernández cree que es "precipitado" hablar de LGTBifobia, "pero que hay una intención es evidente. Cuando la única placa que arrancas es esa, algo de intención tiene que haber, porque si no habrían arrancado más".

"Yo imagino a un borracho rompiendo retrovisores y rompe todos los de la calle o tres o cuatro, pero solo uno es más difícil pensar que no hay intención, aunque lo cierto es que no hay pintadas, pegatinas ni esvásticas como la última vez, solo está la placa arrancada", según Fernández.

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En la nueva sede están desde hace cerca de un año y la convivencia, ha señalado, ha sido "pacífica. Jamás había pasado nada", aunque ha indicado que ahora "el foco mediático" está más encima de ellos por varias entrevistas que han dado, pero hay que ser muy prudente y no hablar abiertamente de LGTBifobia".

De repetirse sí que estaría clara la motivación homófoba, según explica Fran Fernández, y remarca que "la volveríamos a denunciar, porque todas las agresiones que sufre el colectivo lgtbi tienen que denunciarse, al menos para que conste", explica. "Porque si no -continúa- hay gente que se permite decir que hoy en día en València no sufrimos agresiones LGTBfóbicas".