Educación

Los inspectores de educación valoran "muy positivamente" la ley de libertad educativa de PP y Vox

El sindicato mayoritario del cuerpo saluda la ley ya que "se fomenta el valenciano sin imposiciones, se respeta la libertad de elección y se otorga más seguridad jurídica a los centros"

Reclaman que se incorpore el requisito de C1 de valenciano para el acceso al cuerpo

Fotografía de archivo de una clase en un IES de Alzira.

Fotografía de archivo de una clase en un IES de Alzira. / Perales Iborra

Gonzalo Sánchez

Gonzalo Sánchez

La Unión Sindical de Inspectores de Educación de la Comunidad Valenciana (USIE), sindicato mayoritario del cuerpo, valora "muy positivamente" la propuesta de ley de libertad educativa presentada por Partido Popular y Vox.

Para USIE "venimos de 8 años donde las leyes emanadas del Botànico han discriminado uno de los valores dictaminados en la Constitución Española como es la libertad. Las dos principales áreas donde se ha vulnerado este derecho son la escolarización y los derechos lingüísticos".

En opinión de los inspectores, la normativa del Botànico en materia de admisión (potenciar la escuela de barrio) "limitó el derecho de los padres a que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones", quedando limitada al distrito de referencia. "Por lo tanto, no existía la opción de elegir un centro de acuerdo a su ideario o proyecto", explican. El nuevo Gobierno de PP y Vox ha modificado esto para aplicar el distrito único, según el cual los padres pueden elegir cualquier colegio del municipio, sin estar atados a su barrio.

En cuanto a los derechos lingüísticos, critican que la ley vigente del Botànic de 2018 "obliga a los centros a disponer de un solo programa lingüístico, condicionado, ya que impone un carácter mayoritario a la lengua valenciana". En su opinión esto supone "una discriminación al alumnado de zonas castellanohablantes".

Una maestra dando clase en el primer día del actual curso 2023-2024 en el CEIP La Constitución de Quart de Poblet.

Una maestra dando clase en el primer día del actual curso 2023-2024 en el CEIP La Constitución de Quart de Poblet. / Fernando Bustamante

Aspectos positivos

Por contra, la ley también tiene aspectos "muy positivos" como "garantizar derechos constitucionales a la hora de elegir la lengua base por parte de los padres, no quedando condicionado a la elección de los miembros del consejo escolar". Otro aspecto positivo es respetar esa lengua base que eligen las familias "en el aprendizaje de la lectoescritura, es decir, desde Infantil hasta el primer ciclo de Primaria".

En cuanto al valenciano, USIE también considera positivo que se fomente su aprendizaje "mediante certificaciones oficiales cuando se superen la materia de Valenciano en ESO y Bachillerato. A diferencia del sistema actual donde no se promueve el valenciano, sino que se impone independientemente de la cultura y naturaleza de la zona donde se encuentre ubicado el centro", explican.

Otro aspecto que destacan es que se permita la exención del valenciano en las zonas castellanohablantes, "cuya ejecución ha sido dificultada por los anteriores dirigentes del Botànic". Además, en la ley se propone también la exención del Valenciano en las PAU "dotando de mayor coherencia en la aplicación del derecho".

Otra parte de la ley que USIE aplaude es la relativa a poder relacionarse con el centro educativo en cualquiera de las dos lenguas cooficiales sea cual sea el trámite, algo que según el sindicato se venía incumpliendo "de manera reiterada".

Imagen de archivo de una clase de valenciano en un IES de Valencia.

Imagen de archivo de una clase de valenciano en un IES de Valencia. / M.A.Montesinos

Igualmente celebran que el alumnado pueda realizar los exámenes en cualquiera de las dos lenguas cooficiales, excepto en las asignaturas lingüísticas, ya que "en muchas ocasiones el alumnado es conocedor del contenido, pero tiene dificultades para expresarse en una de las lenguas cooficiales, siendo por lo tanto un planteamiento inclusivo.

Enmiendas

Pese a todo, los inspectores de educación proponen varias enmiendas a la ley. La primera es incorporar el requisito lingüístico de C1 para el acceso al cuerpo de inspectores de educación. "Dicha enmienda está motivada, por una parte, por el derecho del ciudadano a comunicarse con la Administración en cualesquiera de las lenguas cooficiales".

También reclaman extender la posibilidad de realizar exámenes en cualquier lengua a la educación Primaria. Para USIE "es un derecho que se debe extender, ya que gran padre de las dificultades lingüísticas se dan en las primeras etapas".

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