David Bisbal regresa a València más vivo que nunca

El almeriense presentó algunas de las canciones de su nuevo disco "Me siento vivo", que todavía no ha salido a la luz, ante miles de fans en la Ciudad de las Artes y las Ciencias

Saray Fajardo

Saray Fajardo

No hay nada mejor para celebrar los veinte años dentro del panorama musical que subirse a un escenario. Y así lo demostró anoche David Bisbal en un concierto que congregó a miles de fans de distintas edades en la Ciudad de las Artes y las Ciencias en una de las noches más calorosas del año. Ni el calor ni las altas temperaturas fueron un impedimento para que los asistentes, muchos de los cuales habían esperado durante horas en la cola, disfrutaran de un espectáculo en el que el intérprete repasó muchos de los éxitos que lo han acompañado todo este tiempo.

Ya han pasado dos décadas desde que aquel joven de los rizos de oro conquistara el corazón de miles de seguidores al obtener la segunda plaza (sólo por detrás de Rosa de España) en la primera edición de Operación Triunfo. A pesar del paso del tiempo, sus ganas de producir música y su vitalidad siguen tan intactas como el primer día. Además, durante este tiempo, el artista también ha formado parte de programas televisivos como "La Voz", que han permitido a sus seguidores conocer en profundidad al almeriense, que se ha convertido en uno de los referentes del pop español y uno de los artistas más cercanos y queridos por el público.

Durante más de dos horas, David Bisbal presentaba ayer en València algunas de las canciones de su nuevo disco "Me siento vivo", que el almeriense ha ido mostrando al público en cada uno de los conciertos que ha organizado durante los próximos meses en distintas ciudades de España, algunas de las cuales ya han colgado el cartel de aforo completo.

¿Cómo están los máquinas?" preguntaba tras salir al escenario en referencia al vídeo del artista que se ha viralizado durante las últimas semanas. "Ajedrez", canción de su nuevo disco, iniciaba el espectáculo que hizo bailar y vibrar a partes iguales a todos los presentes, de distintas edades porque Bisbal es de esos artistas que atrae a todos los públicos no sólo por sus canciones, sino por la puesta en escena. Los presentes esperaban que, veinte años después, Bisbal siguiese deleitándoles con su mítica vuelta. Y lo hizo. Giró y saltó porque Bisbal sigue, si cabe, más fuerte y vital que nunca.

"Quién me iba a decir" fue el segundo tema interpretado por el almeriense, que no dudó en envolverse con la "senyera" durante parte del espectáculo. "Hemos venido a pasarlo espectacular", reconocía entre aplausos. Él, sin duda, lo consiguió porque el artista demuestra espectáculo tras espectáculo que se deja la piel en el escenario.

El concierto destacó por su alto nivel técnico, que pudo observarse a través del juego de luces y los efectos especiales que acompañaban a cada uno de los temas del artista. El intérprete demostró a lo largo del concierto su vitalidad cantando y bailando cada una de sus canciones, en las que combinó todos los géneros y estilos que han marcado su trayectoria musical.

Tras varios temas, Bisbal aprovechaba el subidón del público para presentar uno de sus nuevos temas del disco que se publicará en septiembre. "Por primera vez en mi carrera, he hecho canciones que la gente no esperaba. Esta canción surgió en México en un proyecto muy longevo. Allí lo pasé muy mal porque echaba de menos a Rosannita y a mis hijos. Comprendí que el lugar es donde está la familia", explicaba antes de interpretar "Me siento vivo", la canción que también da nombre al disco. Sin duda, fue el momento más tierno y emotivo del espectáculo, que contó con la presencia de su mujer, la actriz Rosanna Zanneti.

Aunque el concierto estuvo caracterizado por el baile y el ritmo, David Bisbal también interpretó algunos de los clásicos que lo lanzaron a la fama durante los primeros años de su trayectoria. "Ya me hacía falta una gira. Me hacía falta 'El ruido'", indicaba para interpretar una de sus canciones más emotivas y que lleva este título.

Tras ella, volvió el ritmo a la Ciudad de las Artes y las Ciencias. El artista interpretaba "Antes que no" y "No amanece" acompañado por un baile de masas.

Alusión a València

El almeriense supo cómo ganarse el corazón de los presentes durante el concierto. "Me gusta cantar en València porque todo el mundo entiende de música y todo el mundo puede apreciar lo que significa cantar. Mis inicios fueron en una falla de Sagunto y en Alicante he estado en muchas ferias. Es una tierra que amo porque estuvisteis al principio de todo este viaje", explicaba emocionado. Veinte años después algunos seguían allí y otros se habían sumándose por el camino.

Tras la mitad del concierto, fue el momento de interpretar algunas de sus baladas, que, en sus palabras, "forman parte del repertorio y no hay que olvidarlas". Entre ellas sonaron "Quiero perderme en tu cuerpo", "Culpable" o "Dígale".

El artista todavía se guardaba otra sorpresa y presentaba un nuevo "single" de pop ochentero perteneciente al nuevo álbum. Añadía: "Es un sonido que hace tiempo que no lanzábamos, pero creo que es un ritmo muy bueno para los conciertos". "Tengo roto el corazón" hizo bailar a los asistentes, que, a pesar de que se trataba de un tema desconocido, ya tarareaban algunas estrofas. Con esta canción, queda evidente que el nuevo disco del almeriense nos sorprenderá gratamente, aunque todavía tendremos que esperar hasta septiembre.

Bisbal se guardaba para el final un as en la manga. La fiesta, que ya iba llegando a su fin, seguía con "Esclavo de sus besos", "Silencio" o "Si tú la quieres" para dar paso a un estilo más rumbero, en el que no faltaron "A contracorriente" o "A partir de hoy ".

Cuando parecía que el artista ya había entregado todo de sí a lo largo de las dos horas de concierto, los presentes todavía gritaban "otra". El almeriense había abandonado el escenario, pero sus seguidores sabían que todavía faltaban las mejores, esas canciones que enseguida te vienen a la mente si piensas en David Bisbal. "Corazón latino", "Bulería" y "Ave María" cerraban un concierto, en el que el artista demostró estar en su mejor momento, tanto físico como vocal. El intérprete quiso hacer un guiño a aquella época y estuvo acompañado por la proyección del videoclip "Ave María" para demostrar que veinte años después seguía siendo un referente. Si sus primeras canciones se habían convertido en un himno del pop español, sin duda, las que vienen en los próximos meses lo harán pisando todavía más fuerte.