Borja Jiménez, la última revelación
El torero de Espartinas (Sevilla) cerró su contratación en la Feria de Fallas esta semana tras descubrirse como matador de toros en 2023, con triunfos importantes en Madrid frente a ejemplares de Victorino Martín
Borja Jiménez entra en València
El torero revelación Borja Jiménez estará presente en la Feria de Fallas que Espacios Nautalia 360 ya ha cerrado para abrir la temporada valenciana en 2024, tal y como Levante-EMV publicó en exclusiva este jueves. Esta contratación del torero sevillano, según ha podido saber este periódico, ha sido una de las últimas en cerrarse por parte del director general de Nautalia Viajes, Rafael García Garrido, y el gerente de la empresa, Víctor Zabala de la Serna.
Es decir, que este diestro de Espartinas (Sevilla) estaba fuera del serial josefino a principios de la semana -y casi no figuraba en los borradores de los carteles de las Fallas- a causa de los compromisos y los intercambios de cromos que Nautalia mantiene con unos y otros. Y aún así, Borja Jiménez ha logrado entrar en un cartel de los llamados días fuertes de la feria: el lunes 18 de marzo frente a toros de Juan Pedro Domecq y Puerto de San Lorenzo al lado de Cayetano y Juan Ortega.
Espartaco, padrino y referente
Ni una puerta grande de Las Ventas de Madrid frente a tres toros de Victorino Martín había garantizado el sitio a Borja Jiménez en la primera feria de primera categoría de la temporada de 2024 como es la Feria de Fallas. Pero, al parecer, se hizo justicia en las negociaciones y Jiménez entró 'in extremis' dentro de la feria. Porque el diestro criado en casa los Espartaco -con el maestro Juan Antonio Ruiz 'Espartaco' como figura principal y con Espartaco padre como primer maestro- cortó tres valiosas orejas a los ejemplares de Victorino Martín en Madrid el pasado 8 de octubre y ofreció una de las actuaciones más redondas y de apabullante verdad que se han visto este año en Las Ventas. De hecho, el maestro 'Espartaco' va con él a todas las tardes que torea y la relación que tienen es prácticamente familiar. Él mismo le dio la alternativa el Domingo de Resurrección de 2015 en Sevilla.
La más que merecida salida triunfal del torero de Espartinas por la puerta grande de Madrid estuvo rodeada de varios cientos de jóvenes y a gritos de "¡torero, torero!", tuvo un gran clamor, como merecía y correspondía tras una tarde de absoluta entrega, autenticidad y sinceridad en cuanto les hizo, con férrea determinación y honda torería, a tres complicados "victorinos" que no le regalaron ni una embestida.
Ese día, Borja Jiménez tuvo que enfrentarse a tres ejemplares del hierro de la A coronada por el percance de su compañero Román, encastados, sin mayor entrega y sin romper claramente hacia adelante pero que no tuvieron otro remedio que sucumbir a la absoluta verdad de las faenas del triunfador de esta última corrida de la Feria de Otoño.
Su carrera, como tantas otras, ha sido una lucha constante. Precisamente, su confirmación de alternativa en Madrid se demoró ocho largos años. Y no fue hasta el pasado Domingo de Resurrección cuando pisó por primera vez Las Ventas como matador de toros. También destacó en la Copa Chenel, donde se quedó fuera de la final por un error presidencial; su gran dimensión en los Sanfermines frente a una corrida de toros de José Escolar marcó la diferencia y en el mes de julio otra vez en Madrid delante de la ganadería francesa de Robert Margé, dio una vuelta al ruedo y perdió el triunfo con la espada. Ahí, Jiménez brindó un toro al jugador de baloncesto de la NBA, Dwight Howard, presente en el tendido.
Madrid no fue solamente la plaza que lo lanzó. Al final del curso, en la pasada Feria del Pilar de Zaragoza, fue premiado por la peña Peñaflorense con el trofeo Maestro Chenel Antoñete que reconoce la faena para el recuerdo. Jiménez se la realizó al toro 'Fusilito' de Palha, durante el festejo goyesco del 12 de octubre.
La influencia de Julián Guerra
Y todo ello fue posible gracias a su relación con el matador de toros y actual apoderado, Julián Guerra. En enero de este año, el torero sevillano se marchó a Salamanca para convivir con él y forjar a fuego lento su concepto, con entrenamientos diarios de mañana, tarde y muchas veces noche. Con ocho horas de toreo de salón algunos días. Y sin olvidar que únicamente se vistió de luces una tarde en 2022. Fue en su Sevilla natal y vital, la plaza en la que descerrajó la Puerta del Príncipe en una novillada de Fuente Ymbro.
Ahora, es momento de que Borja Jiménez ratifique el estado de plenitud que vive. Y València será testigo de ello en la Feria de Fallas.
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