Aprobado para los tardeos y suspenso a la falta de urinarios

La falta de urinarios públicos es una queja generalizada

Tardeo musical en la plaza 
Ciudad de Brujas. M.D.

Tardeo musical en la plaza Ciudad de Brujas. M.D. / j.m.vigara. valència

José Miguel Vigara

José Miguel Vigara

La experiencia de sustituir algunas verbenas, tradicionalmente multitudinarias y molestas para los vecinos y propensas al incivismo, por espectáculos de DJ con tardeo, ha sido bien recibida por los vecinos, los falleros y los locales de hostelería. En estas fiestas, comisiones como la plaza del Mercado o Doctor Collado han reducido verbenas. Linterna-Na Rovella las ha sustituido por tardeo hasta las 22 horas.

Esto ha evitado la imagen de otros años de miles de personas agolpadas junto a la Lonja, monumento Patrimonio de la Humanidad; y junto a la Iglesia de los Santos Juanes, Bien de Interés Cultural, bebiendo, orinando y llenando de basura y latas de cerveza estos entornos monumentales.

En ese sentido, según explica un portavoz de la Coordinadora de Hostelería de los Barrios de València, Vicente Pizcueta, el tardeo se ha consolidado «como una moda novedosa y agradecida por falleros y vecinos que diversifica la oferta de ocio».

En Russafa, también se han sustituido algunas verbenas por estas fiestas vespertinas, lo que ha reducido las molestias al vecindario. Para Vicente Pizcueta, «la ciudad está desbordada de gente pero afortunadamente con una sensación de control y de ganas de disfrutar de la fiesta». «Con los naturales problemas de suciedad y la lacra de los lateros pero sin ninguna incidencia reseñable», ha remarcado esta fuente.

Por su parte, el concejal de Protección Ciudadana, Aarón Cano, señala que el «tardeo» como alternativa a las disco-móviles en la plaza de Ciudad de Brujas merece un balance «positivo». «Los propios falleros nos trasladan que tendrían que haberlo hecho antes», apunta el regidor. Estos tardeos están teniendo gran éxito. En particular desde el jueves se ha disparado la asistencia. Ha habido llenazos pero con un «descontrol» propio de la fiesta y del aluvión de visitantes que registra la ciudad.

Mientras tanto, Amics del Carme ha detectado un «crecimiento desmesurado de la afluencia de público» respecto a fallas anteriores. Por ende, lamentan que el consumo de alcohol y el desbarre «acabe por deslucir la fiesta».

Asimismo, la relajación ha provocado que aparezcan en Ciutat Vella y otros barrios «ríos de fluidos humanos, basura y desechos en la calle que hacen muy difícil la vida cotidiana y diaria». De hecho, «hay comportamientos que son incompatibles con la decencia», dice un portavoz de Amics del Carme.

Y es que la falta de urinarios públicos es una de las quejas principales que transmiten los hosteleros y los vecinos, por los ríos de orines que corren por las calles después de horas de fiesta. En Russafa y en el Carme este ha sido un problema grave. Por el incivismo de la gente. En la plaza del Mercado o en la plaza del Ayuntamiento abundan las colas para orinar en los váteres públicos. Un conocido hostelero de la plaza del Doctor Collado lamenta: «Mucha gente busca un lugar donde hacer pis y cuando no lo encuentra, acaba haciéndolo en callejones y replacetas». «Ha faltado previsión», subraya.

Por último, los comerciantes del centro y los residentes han protestado también por la proliferación de batucadas durante horas, que impiden trabajar y descansar. La propia Policía Local ha tenido que intervenir por este motivo.