El Defensor del Pueblo amplía la investigación sobre "la ZBE provisional” de Catalá

“El gobierno de la señora alcaldesa tiene que mostrar voluntad de avanzar en las medidas de mejora de la calidad del aire" advierte el concejal Giuseppe Grezzi de Compromís

Giuseppe Grezzi interviene en un foro de Compromís.

Giuseppe Grezzi interviene en un foro de Compromís. / R.L.V.

José Miguel Vigara

José Miguel Vigara

El concejal de Compromís Giuseppe Grezzi llevará mañana a la comisión de Patrimonio la propuesta para que el gobierno municipal presente el plan detallado de implantación de la Zona de Bajas Emisiones tal como se presentó al Ministerio y Europa para la obtención de fondos europeos. De esta manera, apunta Grezzi, su grupo proporcionará al PP "no solo una nueva oportunidad para dotar a València de las infraestructuras y la protección ambiental que merece", sino también la “oportunidad al gobierno de María José Catalá de salir airosa del lío en que se metió tirando abajo todo el trabajo realizado por nuestro gobierno e improvisando una ZBE que incumple con las características que se le requieren”.

De hecho, Grezzi ha informado que el Defensor del Pueblo ha ampliado su investigación sobre la ZBE de València con nuevos datos aportados por su formación. “El gobierno de la señora Catalá tiene que mostrar voluntad de avanzar en las medidas de mejora de la calidad del aire, porque hasta ahora ha buscado subterfugios que han provocado la investigación del Defensor del Pueblo, que han ampliado con nuestra denuncia del apagón de cámaras del Área de Prioridad Residencial. Una actitud irresponsable que deberían corregir de inmediato para cumplir con los compromisos europeos de la Capitalidad Verde, dejar de manchar el buen nombre de nuestra ciudad y no perjudicar la salud de valencianos y valencianas”, ha concluido Grezzi.

Grezzi: "No hay sensores para medir la calidad del aire en la ZBE"

En este sentido cabe recordar que el 15 de diciembre de 2023, el gobierno de PP y Vox aprobó un acuerdo en la Junta de Gobierno Local para establecer como Zona de Bajas Emisiones el Área de Prioridad Residencial de Ciutat Vella. La APR estaba diseñada y contaba con un equipo para realizar un control de acceso, "pero sus cámaras no diferencian entre vehículos más o menos contaminantes, y en su ámbito no hay sensores para medir la contaminación del aire, por lo cual es imposible que en él se pueda medir la evolución de la calidad del aire antes y después de la medida, que es el objetivo fundamental". 

A ello, además, se sumó el descubrimiento de que desde octubre de 2023 hasta enero 2024, "las cámaras de la APR habían dejado de funcionar, provocando que no había ningún control de los vehículos que circulaban por Ciutat Vella; circunstancia que Compromís ha transmitido al Defensor del Pueblo, y que este ha confirmado que añade a la investigación ya en curso", finalizan fuentes de la coalición valencianista.