La defensa de un privilegio de 1605 prolonga el litigio entre los regantes de Sumacàrcer y la Real Acequia de Escalona

La reactivación en septiembre de 2019 de la Comunidad de Regantes de Sumacàrcer ante la amenaza de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) de retirarle la concesión de aguas si continuaba en rebeldía, ha permitido normalizar las relaciones con la Real Acequia de Escalona, aunque no ha resuelto el litigio histórico que ambas arrastran por la negativa de la primera a contribuir a los gastos de mantenimiento y limpieza del canal en base a un privilegio que data de 1605.

«El conflicto continúa porque no pagan», resume el presidente de la Real Acequia de Escalona, Emilio González, a las puertas de la junta general prevista para hoy en la que, previsiblemente, se les volverá a reclamar que compartan gastos después de que la comunidad general haya asumido estos días la limpieza del tramo de canal de aproximadamente cuatro kilómetros que discurre por el término de Sumacàrcer, un trabajo de mantenimiento que no se realizaba desde hace más de una década. «Queremos estar a buenas y es un gesto más de nuestra buena voluntad, si vamos todos juntos y pagamos todos irá mejor para todos, tenemos que estar unidos», señala González, que admite que, a diferencia de lo que sucedía hace unos años, ahora existe una relación, aunque el conflicto de fondo persiste a pesar de que, según detalla, la aportación sería de tan solo «600 euros al año».

"Un derecho histórico"

El presidente de la Comunidad de Regantes de Sumacàrcer, conocida popularmente como La Forzosa ya que la CHJ impuso su constitución en 2006 con este litigio como trasfondo, aunque ha pasado años y años sin actividad, esgrime que en esta nueva etapa se han alcanzado acuerdos y que la única discordancia es la relativa al mantenimiento del canal. Álvaro García recuerda en este punto la asamblea celebrada el pasado septiembre en la que los regantes de Sumacàrcer acordaron defender lo que consideran un derecho histórico que no están dispuestos a dejar perder. La posibilidad que esta disputa acabe en los juzgados parece cada vez más próxima. «Los que tendrían que llevarnos a pleito son ellos», expone García. Los regantes de Sumacàrcer han señalado en diferentes ocasiones que sólo si la justicia resolvía en este sentido, aceptarían contribuir a los gastos de mantenimiento del canal.

Mientras tanto, defienden que sigue en vigor la Concordia de 1605 por la que el señorío que regentaba la familia Crespí de Valldaura autorizó a los vecinos de Castelló a profundizar y ensanchar la acequia que existía en Sumacàrcer para la construcción de la Acequia Escalona con la condición de que «todos lo gastos que ello conlleve sean pagados íntegramente» por los nuevos beneficiarios.

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