Los juzgados de la Ribera registran casi tantos divorcios como matrimonios

No hace tanto tiempo, cuando una pareja se casaba lo hacía bajo un mantra que ya ha quedado obsoleto: «Hasta que la muerte os separe», proclamaba el sacerdote, pues las uniones se realizaban sistemáticamente bajo el paraguas eclesiástico. Sin embargo, hoy en día, cualquier persona puede romper una relación matrimonial en el momento en el que considere que ya no le hace ningún bien. En la Ribera, el año pasado se tramitaron más de dos divorcios al día. Fueron casi novecientos, una cifra que contrasta poderosamente con el número de enlaces matrimoniales que se registraron en el ejercicio anterior, poco más de mil. 

Los datos, ofrecidos por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), representan una ligera variación a la baja en los últimos años. De ese modo, mientras que los juzgados de la comarca tramitaron 905 divorcios en 2021, en 2022 fueron 882. Apenas un 2 % menos, lo que representa un descenso más bien anecdótico. En 2021 también, curiosamente, se oficiaron en la comarca poco más de un millar de bodas. Si bien es cierto que estas cifras no son consecuencia la una de la otra, también lo es que ponen de manifiesto que el número de parejas casadas, aunque crezca, se incrementa a razón de cien o doscientas al año. A fin de cuentas, estas cifras indican que por cada mil enlaces matrimoniales hay más de 800 divorcios. 

Las bodas se dispararon en la Ribera un 60% en 2021 al relajarse la pandemia

El informe judicial también constata que, cuando una pareja decide poner fin a su matrimonio, la fórmula más utilizada es la del divorcio. Los magistrados de Sueca, Alzira y Carlet tramitaron 882 divorcios el año pasado, mientras que tan solo se registraron 68 expedientes de separación, 32 de ellos fueron consensuados mientras que los 36 restantes se concretaron sin un acuerdo entre ambas partes. Ninguno de los juzgados de la comarca registró nulidades matrimoniales. Dicho de otro modo, casi el 93 % de las rupturas se dilucidaron mediante la figura del divorcio, mientras que algo más del 7 % lo hicieron a través de la separación de los cónyuges.

El número de divorcios se redujo entre 2021 y 2022. Durante la pandemia, creció de forma considerable, especialmente los casos de divorcios no consensuados. Los efectos que el confinamiento provocó en algunas parejas y el colapso que se produjo en la tramitación de los expedientes provocaron que la estadística se alterara ligeramente. 

De los 882 divorcios que se tramitaron en el año 2022, algo más de la mitad se concretaron tras un acuerdo, en concreto 498. En cambio, 384 fueron no consensuados. Estos últimos se han reducido entre los dos ejercicios analizados. De igual modo, la estadística por partidos judiciales atribuye, aproximadamente, seis de cada diez expedientes al juzgado de Alzira, que recibió 519 casos, por los 212 de la sede judicial de Sueca y 151 de la de Carlet.

Modificación de medidas

El informe del TSJCV también cuantifica las peticiones tramitadas para modificar las medidas que se aplican ante las rupturas matrimoniales, tales como las prestaciones de manutención o el régimen de visitas a los hijos menores de edad. En ese sentido, 370 exparejas cambiaron alguno de estos aspectos, bien de forma consensuada o bien sin alcanzar ningún acuerdo satisfactorio para ambos.