Así será el nuevo acceso a Alzira con el traslado del Pont de Xàtiva

El alcalde confía en acabar de definir el proyecto en enero para que las obras que ayudarán a evitar inundaciones se liciten «lo antes posible»

La reordenación toma cuerpo y solo falta decidir si se autorizará el paso por debajo de la CV-50  al tráfico de Carcaixent

Actual confluencia de la CV-50 con la CV-41 junto al barranco de la Casella.

Actual confluencia de la CV-50 con la CV-41 junto al barranco de la Casella. / Perales Iborra

La reordenación del nuevo enlace entre la CV-50 y la antigua carretera de Carcaixent derivada de la necesidad de ampliar el Pont de Xàtiva para evitar las inundaciones que el barranco de la Casella provoca en Alzira incluirá finalmente una pasarela ciclopeatonal en el lugar que hoy ocupa el puente para facilitar la conexión entre los barrios. Únicamente falta por definir si la Conselleria de Obras Púbicas acepta crear un acceso mediante un «Stop» para los vehículos que, procedentes de Materna o Carcaixent, se dirigen a la plaza de Sant Judes o les obliga a realizar este cambio de sentido en la rotonda de la CV-50 ubicada frente al bingo.

Croquis de la reordenación prevista, con el nuevo barranco sobre el Casella a la derecha de la imagen.

Croquis de la reordenación prevista, con el nuevo barranco sobre el Casella a la derecha de la imagen. / Levante-EMV

El alcalde de Alzira, Alfons Domínguez, y el concejal de Urbanismo, AndrésGomis, confían en que el proyecto se acabe de definir este mes de enero para que las obras se puedan licitar «lo antes posible» ya que existe una partida de cinco millones de euros que asignó el Gobierno central en el presupuesto de 2023 para esta actuación.

El proyecto prevé desplazar el actual Pont de Xàtiva unos 200 metros aguas arriba al objeto de ampliar la capacidad de desagüe de lo que hoy es un cuello de botella en el barranco de la Casella. Para dirigir el tráfico hacia este nuevo paso se prevé construir una pequeña rotonda junto a la estructura del centro comercial que garantizará el acceso tanto a las viviendas de Materna como al polígono. 

Las obras suprimirán el carril de desaceleración de la CV-50, pero mantendrán el otro brazo que baja hacia la plaza de Sant Judes. La propuesta del ayuntamiento plantea que los vehículos que circulan hacia Alzira puedan realizar un giro a la izquierda para entrar por este vial al casco urbano, lo que representa el único aspecto que falta concretar.