Todos los temas tratados ayer en la «cumbre» de los vecinos con el equipo de Gobierno municipal tuvieron carácter genérico y serán abordados en próximas reuniones con los delegados de cada área. Ayer, no obstante, se sentaron las bases para llegar a acuerdos en muchos de ellos, por ejemplo, en el aprovechamiento de solares y locales que son propiedad del ayuntamiento y están abandonados.

María Jose Broseta trasladó a Rita Barberá la petición de utilizar estos solares para uso vecinal con la construcción de huertos urbanos, aparcamientos etc. Rita Barberá explicó que es posible hacerlo siempre que se analicen las circunstancias y luego ese uso no interfiera en el destino final del solar, como ha ocurrido en otras ocasiones.

Importante fue también el acuerdo al que se llegó para regular las Juntas Municipales de Distrito, órganos se representación vecinal cuyas reuniones han sido últimamente muy cuestionadas por los propios vecinos. En las del mes de diciembre hubo plantes generalizados por la hora y la premura en la convocatoria, algo que impedía presentar propuestas.

En la reunión de ayer se acordó que a partir de ahora las juntas se celebren a las 18 horas del miércoles siguiente al pleno municipal, de manera que los concejales tengan todos los temas estudiados y los vecinos puedan presentar preguntas o propuestas con toda la garantía de transparencia.

Hidrantes y bibliotecas

Otras medidas menores para las que no hubo obstáculo son la colocación de hidrantes o bocas de riego a menos de 100 metros de todos los centros escolares; la ampliación del horario de las bibliotecas municipales «Vamos a ver cuánto cuesta esto y si el sobrecoste nos lo permite», dijo la alcaldesa; la apertura de la Marina Real a los barrios colindantes, los acuerdos alcanzados con la ministra de Fomento sobre el soterramiento del túnel de Serrería o la ejecución de una parte del Parque Central.

En lo que no hubo avances fue en el soterramiento de los contenedores de basura, algo que es «inviable económicamente», ya que «cuando se planteó esta opción hace años ya valía un millón de pesetas cada contenedor», dijo Rita Barberá. Tampoco prosperó el aumento de las subvenciones para las 75 asociaciones de vecinos, pues, según explicó la alcaldesa, «estamos en situación de sequía» económica.

En general, «se ha hecho un buen repaso» de la ciudad, dijo, y existe el compromiso de seguir avanzando.