La vicealcaldesa de València y líder socialista, Sandra Gómez, ha sorprendido a última hora del lunes con una contundente defensa de la todavía presidenta del Partido Popular en la C. Valenciana, Isabel Bonig, que esta mañana ha comunicado a la dirección nacional de su partido que no dará la batalla para seguir liderándolo después de verano. Una renuncia obligada ante la falta de apoyos internos y el deseo casi explícito de Pablo Casado de entregar el cetro de poder popular a Carlos Mazón, actual presidente de la Diputación de Alicante.

Gómez ha salido en defensa de Bonig al considerar que su dimisión en diferido ha sido un "proceso de descrédito organizado y orquestado que ha sufrido una mujer" y ha asegurado que le da "rabia ver a otra mujer en política 'apartada' porque hay una especie de cónclave superior de hombres que así lo ha decidido. Y encima leer esta falsa condescendencia. Una vez más vemos a los señores de turno determinar y decidir cuál es nuestro papel", en referencia a un mensaje lanzado por Carlos Mazón donde la vicealcaldesa asegura que hay algo más que un agradecimiento a su trabajo de los últimos años.

La líder del PSPV-PSOE en la ciudad de València ha aprovechado para cargar también contra su rival en el PP municipal, Maria José Català, a quién ha advertido que ella podría ser la siguiente en caer.

Gómez ha sorprendido especialmente al reconocer a Bonig su papel al frente del PPCV "tras una derrota histórica del PP y un lastre de casos de corrupción, se echó a la espalda el PP y dio la cara por un proyecto político en el que poca gente ya creía" y ha reivindicado que puso "su cara en un proyecto absolutamente desintegrado que era el PP en 2015".