Basta una noticia sobre el estado "asilvestrado" de la vegetación en València para que los lectores se lancen a denunciar los numerosos problemas que hay con la jardinería y, sobre todo, con la poda, un problema que no es solo estético, sino sanitario, pues en algunos casos eso supone la entrada de ratas en las viviendas. De hecho, una vecina de Tres Cruces ha tenido que recurrir a una empresa privada para poner coto a los roedores ante la inacción de los servicios municipales.

A la denuncia de Ciudadanos sobre el estado de una parcela en Malilla se han unido decenas de ellas. En Amparo Iturbi con Doctor Carlos Caballé Lancry hay ramas de árboles que se meten en las ventanas y los balcones. En la Avenida de la Plata hay una rama que lleva un mes en el suelo. En el Grao, dice otro vecino, ponen cemento en los alcorques para no sustituir los árboles. En los alrededores de la Fe, Malilla o la Fuente de San Luis, los vecinos hablan de falta de cuidados en la vegetación. Y ayer Ciudadanos volvió a la carga denunciando el abandono del jardín de Josep Montforte i Teulada, en el barrio de Campanar, donde los vecinos lamentan las pintadas y la acumulación de hojas secas.

Plaga de ratas en una calle de València

Plaga de ratas en una calle de València Levante-EMV

Problemas de salubridad

Todos estos problemas tienen, además, el añadido de la insalubridad general, sobre todo por la propagación de plagas y su llegada a los propios domicilios. Isabel vive en Tres Cruces y asegura haber tenido que recurrir a una empresa privada para poner a raya a las ratas que le entraban al balcón a través de un árbol cuyas ramas llegan a la fachada. Por los excrementos, comprobó a mediados de agosto que los roedores llegaban al balcón y tras comunicar los hechos al ayuntamiento y no recibir respuesta tuvo que contratar a una empresa privada para comprobar que eran ratas y capturarlas.

En su fachada no hay nada que facilite la entrada de estos animales, asegura, por tanto "tienen que entrar por el árbol que hay en la calle", cuyas ramas llegan hasta la fachada. "Llamé al ayuntamiento y me dijeron que no habían dado aviso a la sección de plagas pero sí a Jardinería, pero nadie ha hecho nada", asegura la mujer, que recuerda que el año pasado tenían un problema de abejas y tampoco hicieron nada los servicios municipales porque "están protegidas".