Los tenderos del Mercado de Colón insisten en que se traslade el mercado agrícola semanal y rechazan negociar

Acusan al concejal de Agricultura de incumplir su promesa de llevarse los puestos de venta directa si perjudicaban a sus negocios

Uno de los puestos del mercadillo agrícola de los martes junto al Mercado de Colón

Uno de los puestos del mercadillo agrícola de los martes junto al Mercado de Colón / GERMAN CABALLERO

La Asociación de Comerciantes del Mercado de Colón no quiere negociar con el Ayuntamiento de València sobre el mercadillo agrícola de los martes, donde los productores venden directamente al consumidor, y ha vuelto a reclamar hoy al concejal de Agricultura del Ayuntamiento de Valencia, Alejandro Ramón, que "cumpla su palabra y retire de inmediato el mercadillo de la calle Martínez Ferrando". Los puestos de verdura y hortalizas se colocan en la calle peatonal anexa al recinto modernista del Pla del Remei en cuyo sótano hay cuatro puestos de productos frescos, entre ellos una frutería, que consideran el mercado agrícola es una competencia desleal. Los comerciantes han rechazado en un comunicado la propuesta de negociación del ayuntamiento y aseguran que "cualquier escenario de negociación que no pase únicamente por la retirada de dicho mercadillo".

"El cierre de nuestro mercado fue una protesta en defensa de nuestros compañeros de Frutas y Verduras Fina, agricultores de l’horta sud de Valencia, porque dicho mercadillo supone una grave amenaza para su supervivencia", han asegurado los vendedores de Colón, que recuerdan al concejal de Agricultura que en la reunión del día 27 de marzo, se comprometió a "probar unas semanas" el funcionamiento del mercado de venta directa de los agricultores. También anunció, añaden los vendedores, que si "no se producen sinergias y se siguen sintiendo amenazados, nos volvemos a sentar y buscamos otra alternativa y otra ubicación”. Palabras que volvió a repetir públicamente al día siguiente ante los medios de comunicación.

Los vendedores han mostrado en un comunicado su descontento tras la reunión del pasado 8 de abril, en la que se le entregó el informe del impacto negativo que han sufrido las ventas de la frutería durante los días de mercadillo, que han descendido un 15%. Una reunión, añaden, en la que pese a los datos negativos el concejal, dicen, "rompió el compromiso y en su lugar nos ofreció formar parte de una comisión que estudie soluciones que favorezcan a todas las partes". Aseguran los vendedores que Alejandro Ramón no tiene la "más mínima intención de suspender" el mercado.