Tapan los desnudos con cabezas de pájaros del despacho de Galiana

El nuevo equipo de gobierno se basa en un informe de Patrimonio que avala que la obra de Vinz es «arte efímero»

Los murales causaron gran polémica en su día por la su atrevimiento

Despacho de Carlos Galiana decorado por el artista urbano Vinz Feel Free

Despacho de Carlos Galiana decorado por el artista urbano Vinz Feel Free / GERMAN CABALLERO

Moisés Domínguez

Moisés Domínguez

Un informe de Patrimonio avalando que se trata de «arte efímero» es el argumento por el cual el actual equipo de gobierno se ha quitado de en medio un verdadero dilema que había heredado de sus antecesores: la pintura mural con la que el concejal Carlos Galiana había decorado su despacho. Con ese argumento, los pintores entraron en el despacho, que ha sido adjudicado al concejal José Marí Olano, y le echaron una capa de blanco a la obra del artista urbano Vinz Feel Free. 

Apenas medio año después de tomar posesión de su cargo como concejal, en aquel momento de, entre otros, Comercio y Dominio Público, Carlos Galiana sorprendió con la actuación decorativa que había hecho en su despacho, ubicado en una esquina de la segunda planta. Las paredes fueron pintadas por el artista Vinz Feel Free con la creación «Nosaltres, el poble», a base de escenas que forman parte de su particular estilo, incluyendo figuras humanas desnudas con cabeza de animales, especialmente avifauna. 

Donación de artista... con efecto rebote

Salta a la vista que Galiana quería dar un aire transgresor. En aquel momento se planteó que la intervención la costearía de su bolsillo, sin embargo, según se dijo, el autor la hizo de manera gratuita como contribución a la difusión del «street art», consiguiendo el esperado efecto rebote, al tratarse tanto de un lugar tan emblemático como el interior del ayuntamiento como por el hecho de tratarse, no de un cuadro, sino de una pintura directamente sobre la pared. «Quien gobierne en el ayuntamiento de València dentro de cuatro años podrá así volver a pintar el despacho y redecorarlo». Galiana, sin embargo, consideraba que «sería una pena que se perdiera el mural, porque es una obra de arte». No faltaron las críticas entre los que consideraban los cuadros como excesivamente atrevidos para un espacio en el que se producen reuniones oficiales de todo tipo. 

El despacho no es del concejal

El caso es que, tras la llegada del nuevo gobierno municipal, se ha optado por tapar definitivamente las pinturas. Además del argumento de ser arte efímero -apuntado ya por el anterior edil-, se sostenía que es inadecuado que un concejal tome una decisión de este tipo sobre un espacio que no es de su propiedad y que el resto de ediles, si llevan cuadros, pósters o fotografías, los llevan enmarcados, para poder ser retirados en caso de abandonar su función pública. Fue una situación incómoda para los nuevos rectores porque temían la reacción de aquellos que son favorables a iniciativas de este tipo. Por eso, el informe que avala la temporalidad de la pintura. 

Vinz empezó a intervenir paredes del barrio de Russafa a primeros de la pasada década, en el que los pájaros simbolizan a los seres libres, dentro de un contexto de crítica social que le acompaña desde el primer momento. Se recuerda que sus obras eran muchas veces objeto de la vandalización mojigata, al exhibir penes, pubis y pechos sin ningún recato, tal como sucedía en las paredes del despacho municipal.