Oliva concluye el ARRU que ha mejorado 80 viviendas con 4,5 millones de inversión

El Ayuntamiento de Oliva está a punto de concluir todos los trámites administrativos para dar por acabadas las actuaciones que ha llevado a cabo desde el año 2016, cuando se le concedió la ayuda para el Área de Regeneración y Renovación Urbana (ARRU) para rehabilitar viviendas y varias calles de su casco histórico.

En total, ha sido una inversión de 4,5 millones de euros que se ha repartido entre el Gobierno, la Generalitat, el ayuntamiento y la aportación que han hecho los propietarios de las viviendas para completar las ayudas.

Este plan ha permitido rehabilitar nada menos que 75 viviendas, mientras que otras cinco han sido objeto de reedificación, es decir, fueron derruidas y construidas de nuevo, lo que significa que se ha actuado en un tota de 80 inmuebles. Todo ello ubicado en calles como García Ordóñez, Cantereria, avenida Font d’en Carròs, Covatelles, Senda dels Lladres Carrasca o Comte d’Oliva, entre otras.

Aunque el grueso de las ayudas han ido a parar a la rehabilitación de viviendas particulares, esta ayuda también ha implicado la mejora del entorno. Concretamente, se ha llevado a cabo la mejora urbana de la calle Sant Vicent, una de las más emblemáticas e históricas, y de la zona de la «escoleta» El Caragol, que incluía las calles Ponent, Sant Pancraci y Divina Gràcia y que consistió en la reurbanización y ensanchamiento de algunas de estas vías. También se ha eliminado el talud de la calle Honda.

El plan arrancó en 2016 y ha sido prorrogado hasta en cinco ocasiones: en mayo del 2019, el mismo mes del 2020, en septiembre del 2021, octubre del 2022 y hace unas semanas, cuando la Generalitat anunciaba la última, en este caso por un valor de 713.613 euros, con una asignación de 624.274 por parte del Gobierno y otros 89.339.

El proyecto global concluye en este 2023. En las últimas semanas, el departamento de Urbanismo ha cumplimentado la fase de certificación final de las obras que ya se han ejecutado. En los próximos días se procederá al pago para concluir de forma definitiva estos trabajos.

Se trata de una de las mayores inversiones llevadas a cabo en Oliva para la mejora de casco antiguo. La inclusión en este programa supuso en su día un gran esfuerzo y trabajo por parte del ayuntamiento, tanto por los trámites técnicos como políticos que tuvo que superar.

Estas ayudas se han destinado a propietarios y propietarias de viviendas del casco antiguo que tenían intención de invertir en su conservación y mejora, incluyendo tanto la estructura del inmueble en todos sus aspectos fundamentales como las instalaciones de servicios básicos, lo que incluye la electricidad, saneamiento, eficiencia energética o accesibilidad pero también la instalación de ascensores en edificios.

Son medidas que tenían como objetivo evitar la degradación de los edificios del casco antiguo de Oliva por el paso del tiempo. Esa mejora también debía ir acomañada de una actuación que permitiera a esas viviendas contar con un entorno apropiado, de ahí la actuación que se ha llevado a cabo en distintos espacios públicos.

Suscríbete para seguir leyendo