Lejos de calmarse, las aguas bajan revueltas en el seno de la Real Acadèmia de Cultura Valenciana (RACV) tres semanas después de aprobarse por la mínima la declaración conjunta con la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL) que ha sentado las bases de la pax lingüística sobre el valenciano. Voro López, director de la Secció de Llengua de la RACV, filólogo de cabecera de la centenaria institución y cara visible de la oposición interna al proceso de acercamiento a la Acadèmia, pronunció ayer una conferencia en la sede de Lo Rat Penat en la que instó a presentar una moción de censura o un proceso de destitución contra el actual decano de la RACV, Federico Martínez Roda, que ha liderado este histórico paso de la entidad representante del secesionismo lingüístico.
A juicio de Voro López, el proceso revocatorio „no contemplado en los estatutos de la RACV„ debería materializarse «después del verano» una vez se haya «preparado una alternativa» y «buscado a un candidato sustituto», según avanzó a este periódico. «No se puede consentir que un decano se arrogue toda la autoridad de la institución cuando una mayoría está en contra de sus decisiones. La única salida que nos queda es una moción de censura o una destitución del decano por el medio que sea procedente», anunció Voro López. Así terminó su conferencia en el Foro de Opinión de Lo Rat Penat, una entidad que ha declarado persona non grata al decano de su academia hermana „la RACV„ hasta el punto de suspender la conferencia que tenía previsto pronunciar Martínez Roda con el título «Cent anys de la RACV» y sustituirla por la de ayer de Voro López.
El modus operandi para intentar apartar al decano no está definido. Saben que no es sencillo. Pero, dado que el reglamento no contempla la figura de la moción de censura, barajan introducir en el orden del día de una junta general un punto que proponga la destitución del decano. Su eventual relevo „algo que Martínez Roda descarta por completo„ supondría el fin del incipiente proceso de reconciliación entre dos academias rivales.
El responsable de la Secció de Llengua de la Real Acadèmia hizo un repaso crítico a los principales documentos „internos y públicos„ de un proceso que ha desembocado en la declaración AVL-RACV, que insta a «establecer una relación normal» y propiciar la «cooperación efectiva» entre las dos entidades «desde el respeto al ordenamiento jurídico valenciano», que fija en el Estatut d'Autonomia que «la AVL es la institución normativa del idioma valenciano».
El autor del Diccionari General de la Llengua Valenciana recriminó al decano que no se hayan respetado las condiciones que impuso la Secció de Llengua para poder negociar con la AVL. La principal cláusula era que la normativa ortográfica y gramatical de la RACV sea reconocida oficialmente.
«No es presidencialista»
Asimismo, López evidenció ayer su malestar por que el decano haya afirmado que él es competente para llevar adelante la negociación con la AVL y que la votación de la junta general había sido una «deferencia» con los académicos. «¡Eso sí que no!», dijo Voro López, que considera que la RACV no es una institución presidencialista, sino que el decano representa a los académicos y no puede adoptar decisiones por su cuenta. La única salida, recalcó, es apartar al decano.
Martínez Roda fue elegido decano de la Real Acadèmia a finales de diciembre de 2015, como candidato único, tras haber ingresado en la institución en 2006. Su objetivo desde el primer momento ha pasado por sacar de la «marginalidad» a la RACV „«el limbo», lo bautizó él„ para sellar el conflicto residual que se arrastra desde la Batalla de València. La resistencia interior continúa haciéndole frente pese a la votación que ganó. La fractura es total.
